HABLAR de La risa cura, es el intento a hacer una pausa que alienta el ánimo, ente el desconcierto diario por las noticias sobre cómo se ha enrarecido el entorno donde vivimos, tanto en lo político como en la percepción y realidad de una triste vuelta a la Colombia que teme por la defensa y protección de la vida ante el recrudecimiento de la violencia, de actos extorsivos de una guerrilla que se sienta en la mesa de la paz total y de una inseguridad circundante en todas las ciudades y regiones.
En estas circunstancias una iniciativa como la del programa de televisión colombiano (talk show) La risa cura, en Redmas TV y en teatro en vivo, cae muy bien sobre todo porque se trata de tocar, con el humor de los comediantes y de los entrevistados, la vulnerabilidad, bien por problemas de salud mental u otros, sin tapujo alguno, con testimonios e historias de vida que sorprenden, dignas de imitar.
Se dice en la reseña de La risa cura que el programa se concibió en el deseo de inspirar, educar y curar personas por medio de la risa, que va llevando a la audiencia a una catarsis dentro de los temas delicados y reales del común de la gente o de personas con condiciones especiales, en la conciencia de que todos tenemos problemas [somos vulnerables], pero que siempre es mejor reír que victimizarse (parafraseando a Antonio Sanint).
Lo increíble está en la actitud de personas que en difíciles situaciones son capaces de superarse, de reír a la par y de entablar entrevistas llenas de humor. Algunos de los temas relacionados son: Síndrome de Asperger´s, Síndrome de Tourette, ansiedad y depresión, déficit de atención, epilepsia, racismo, discapacidad física y bipolaridad.
Los comediantes de cabecera han sido capaces de mostrar que su humor no es sinónimo de no tener dificultades pero que es bueno destaparlas sin tabú. Sin pena, Antonio Sanint menciona su déficit de atención, Preston Gringo de los momentos de ansiedad y pánico, Camilo Sánchez de su Tourette y Oscar Suárez de la bipolaridad.
Eso mismo les ha permitido entrevistar a personas que lo dejan a uno atónito porque son talentos increíbles y reflejan cómo viven la vida sin queja, con valentía y entusiasmo, con un enfoque de su vida muy natural y hasta destacado profesionalmente.
Entre los entrevistados ha habido personas, algunas famosas o no, con distintas condiciones como ceguera, epilepsia, autismo, trastorno obsesivo compulsivo, sobrepeso, calvicie, divorcio, talla baja y otras, todas con una actitud impresionante.
Llega incluso el momento de no tener la distinción de quién explota más el humor: si los comediantes expertos o los mismos entrevistados. Es un programa que vale la pena ver -tiene cerca de ochenta mil seguidores en YouTube y más de treinta millones de visitas- y en especial porque es sumamente divertido y un aplauso a la vida.
*Presidente Corporación Pensamiento Siglo XXI