Mauricio Botero Montoya | El Nuevo Siglo
Lunes, 21 de Diciembre de 2015

Venezuela, intimidades del no fraude

“Ministro Padrino optó por sabia decisión”

 

Respecto a las elecciones del 6 de diciembre, había allí dos tendencias en las fuerzas armadas. Una encabezada por el comandante de la Guardia Nacional, hoy acusado de narcotráfico por Washington, y el comandante del ejército dispuestos a facilitar un fraude electoral. Y otra que incluía doce generales de cúpula militar de las demás fuerzas. En la mitad, indeciso, estaba el ministro de defensa, general Padrino López, enriquecido él y su familia durante el régimen chavista. Como conocían los sondeos que preveían la derrota del gobierno el consenso fue respetar el resultado y advertir al ministro Padrino López, persona ferozmente ambigua, de su decisión. Éste que había recibido mucho más que los 70 contratos que la administración Uribe en Colombia diera a los Nule, puesto en la tajante disyuntiva, hizo de tripas corazón. Sacó en un avión privado en secreto y afán a su familia para  Estados Unidos, ya aligerado de su responsabilidad familiar e hizo saber al Presidente de la Asamblea, Diosdado Cabello del consenso.

 

La conversación fue áspera pero breve: las fuerzas militares tenían ya diseñado el Plan República, que en caso de una alteración del orden público motivado por el fraude, restituirían el orden, le advirtió. Hubo otra reunión con el presidente Maduro, varios ministros, un general cubano y altos mandos militares, y estos, incluyendo el cubano,  advirtieron las graves consecuencias que se derivarían de un fraude. De ahí que Cabello (es un decir pues es calvo) aceptara pasar “a la retaguardia”.

 

El día de las elecciones, de nuevo el ministro Padrino advirtió por la TV a la directora del Consejo  Nacional Electoral que actuara con transparencia y prontitud. Y cumplió al menos con lo primero. Lo demás ya se sabe. La Canciller, tratando de salvar del ahogado el sombrero. exigió que la prensa se retractara de sus acusaciones del supuesto fraude. Pero los medios digitales que conocían la intimidad de lo ocurrido lo revelaron con pelos y señales en especial “Pancaliente” como adecuadamente se llama ese medio en la Red.

 

Coletilla, deseo a mis lectores paz y felices fiestas. Y me despido hasta el año entrante.