No necesitamos de un milagro para encontrar una mujer que nos saque del mar de la corrupción en el que naufraga nuestro país, aunque estemos a punto de rodar al abismo más profundo.
Aún nos queda una esperanza, la expresan los diferentes candidatos de las coaliciones cuando se les pregunta en los foros a los que son invitados: ¿Cuál es su personaje ideal? Todos a una responden: “mi personaje ideal es la excanciller de Alemania Àngela Merkel, mujer serena, decidida y capaz de ejecutar sus decisiones, o también Michelle Bachelet que fue evaluada entre las mujeres más poderosas a nivel latinoamericano”.
Mujeres sobresalientes de Colombia abundan, pero supongo que los candidatos sienten vergüenza mencionarlas por ser colombianas, ellos prefieren figuras del mundo internacional.
Deberíamos tomar como referentes los nombres de María Emma Mejia, destacada en el mundo internacional como embajadora en España: Pilar Moreno de Ángel, historiadora notable; Zulima Mena, exviciministra de Cultura que ha trabajado incansablemente por las negritudes, y una mujer que le dio vida al teatro a nivel internacional, la inigualable Fanny Mikey.
Afortunadamente para las elecciones de Congreso 2022 se inscribieron más de 1.130 mujeres, lo cual significa un avance de la participación femenina en el ejercicio democrático.
Por espacio limitado en esta columna sólo enumerare unas pocas líderes como ejemplo a seguir: Mabel Lara, inteligente a quien todos conocemos, es una mujer de éxito, parte de su trabajo siempre ha estado a favor de las mujeres del Pacífico para que no sean marginadas de la sociedad, ni abandonadas en su pobreza.
Andrea Padilla, PhD en Derecho, ex concejal. Ha sido notable por defender los derechos de los animales. Su trabajo consagrado ha motivado los sentimientos del ser humano, lo que jamás habia sido contemplado ni siquiera por especialistas.
Esperanza Andrade, senadora, trabajadora incansable por las regiones, ha enfocado sus esfuerzos en tres pilares fundamentales: la familia, las mujeres y los niños.
María Fernanda Cabal, senadora líder polémica, que todos los colombianos esperábamos fuera la candidata oficial del Centro Democrático, sorpresivamente los resultados se dieron en contra de la voluntad popular.
Importante es la participación de la mujer ante el entorno social que ha venido cambiando al unísono con los avances tecnológicos y científicos que tendrán repercusiones en los ámbitos personales y sociales.
Serán nuevos los retos como también las respuestas para superarlos, lo que exige honestidad, creatividad, método y consensos para solucionarlos y ejecutarlos.
Las elecciones del 2022, son una oportunidad para enmendar nuestras equivocaciones, para no reelegir damas machistas y populistas que se opongan a proyectos emanados de la voluntad popular.
Es hora de que el hombre tome otra actitud en cuanto a conductas, creencias y prácticas sociales para que la mujer sea libre de promover su independencia y su derecho a gobernar. Hay que acabar con la corrupción. Las líderes definirán el rumbo del país para los próximos años.
Desafortunadamente el Congreso ha perdido su autonomía como institución representativa del pueblo colombiano.