Bien se quisiera conocer cómo piensa el gobierno reactivar la economía. Es claro, y vale la pena repetirlo, que no es a punta de centralizar todo en un Estado magnánimo sin dar confianza a las empresas para invertir. Los indicadores de inversión ni el índice de confianza sectorial son, hasta al momento, alentadores.
Para adentrarse un poco más en el pensamiento del gobierno, no se trata solo con solicitar la rebaja de las tasas de interés, aunque es de esperar que el mercado, la inflación y la economía mundial también empiecen a dar señales a la junta del Banco de la República para entrar en esta senda.
Como se ha visto y hasta el mismo presidente Gustavo Petro lo reconoce: la necesidad de mejorar la productividad de los colombianos es el camino para generar mayores ganancias, elevar los ingresos y crear riqueza o reducir las cifras de pobreza.
También se podría deducir la intuición del gobierno a partir de sus recientes declaraciones en Andicom2023, el congreso internacional de TIC (Tecnologías, información y Comunicaciones) en Cartagena, donde el ministro de las TIC, Mauricio Lizcano, menciona a la Inteligencia Artificial, pero son más bien las tecnologías la base para entrar en una fase de reindustrialización, mejorar la productividad y reducir las brechas.
Según el ministro, la propuesta del gobierno tiene tres estrategias: ampliar la conectividad en fibra óptica y pasar de un índice de conectividad del 65% al 85% al final de gobierno; crear ecosistemas de innovación en las regiones -según los nombra- donde se unan gobierno, empresas, emprendimientos, y entidades crediticias (lo llama crédito popular) para que se monte en las regiones ecosistemas de innovación en software y hardware que sean herramientas dirigidas a mejorar la productividad de las empresas en el universo del país digital, en clústeres de educación, salud, turismo, agro digital, dentro del universo de las llamadas carreteras digitales 5G.
Esto suena bien, así no tenga que ver con el titular de impulsar la Inteligencia Artificial, que tiene otra connotación. Como lo son también las propuestas de la Andicom en atender con urgencia los desafíos de seguridad digital, de la ciberseguridad y perfilar la necesidad de crear la Agencia Nacional de Seguridad.
Sin embargo, esto no va a funcionar si no viene unido a una verdadera intención de bajar las tasas de desempleo, de informalidad, de rotación de los empleos y de calidad de la educación como lo dijo el representante del BID para Colombia, Ramiro Pérez, en el seminario internacional de ANIF y AS-COA.
No obstante, esto tampoco va a la nuez del asunto. Es preocupante que el Índíce de Confianza Sectorial (ICS), sacado por Sectorial.com, se ubicó en 33,3 puntos el pasado agosto, lo que representa una reducción de 16,5% frente a agosto de 2022, cuando se encontraba en 39,9 puntos, y una disminución de 22,8% en relación con julio de este año, cuando fue de 43,2 puntos. Los sectores con mayores alertas fueron: salud, transporte, energía, minería y construcción y los que tienen mayores oportunidades, como agricultura y turismo.
Aquí vuelve a jugar como pieza sustancial el argumento de Fukuyama:la confianza es la precondición de la prosperidad.
*Presidente Corporación Pensamiento Siglo XXI