Otra red social nueva. Otro unicornio. Parece que cada seis meses sale una red social peligrosa. Son modas, sí. Pero modas que debemos prestarle atención porque poco a poco van formando una tendencia de comportamiento. Sobre todo, entre los más jóvenes.
Arranquemos por decir que BeReal es una red social que fue creada en Francia, lo que ya es toda una novedad. Pero ¿qué hacen los usuarios en BeReal? Básicamente, muestran todo en cualquier momento. La aplicación envía una notificación al usuario en cualquier momento del día. Desde ese instante, esa persona tiene dos minutos para subir una foto mostrando el rostro y haciendo lo que realiza en el momento. Una locura.
Lo complejo del asunto es que la aplicación toma una foto con la cámara frontal y trasera del celular al mismo tiempo. ¿Qué pasa si el usuario no sube la foto? El castigo es que no tendrá la oportunidad de ver lo que postean obligados otros usuarios. En otras palabras, si quiere ver tiene que mostrar.
Por supuesto, este modelo de mostrar todo, sin que nada importe ha sido un éxito. Pasajero como todas las modas. Pero un éxito. La aplicación se ha descargado 43,3 millones de veces desde su lanzamiento, con más de 40 millones de esas instalaciones en 2022. Cifras de descarga que superaron al viejo Facebook y comienzan a asustar al joven TikTok.
La lluvia de cuestionamientos que ha tenido esta aplicación no se hizo esperar. Decenas de expertos en seguridad digital, protección de datos y sociólogos han puesto el grito en el cielo. No les falta razón. ¿Qué pasa si estas en la oficina y muestras información relevante a tus competidores? Eso en el mejor de los casos. ¿Y si muestra un maltrato en la casa? Bueno y podemos seguir con la cantidad de escenarios posibles.
Ahora, la pregunta del millón ¿y el sentido común? Bueh, estamos pidiendo mucho. ¿En qué cabeza cabe la posibilidad de publicar fotos en cualquier momento del día, en cualquier lugar y en cualquier situación para que cualquier persona (bueno y sobre todo mala) pueda verla y hacerse una idea para hacer daño? De verdad que sólo escribiendo la pregunta se te sale una risa nerviosa.
Y es que el tema, precisamente, es ese: el sentido común de las nuevas generaciones frente a lo que proponen las nuevas plataformas. Y no, no estamos para dar sermones sobre privacidad. Peor viniendo de una generación que llamaba desde la casa a desconocidos. Pero sí es un caso de estudio pensar en que una red propone una dinámica tan traída de los cabellos y más de 30 millones de usuarios la siguen, como para probar.
Aplicaciones como BeReal son modas. Globos que se inflan mucho y que al final terminan explotando más temprano que tarde. Pero el ejercicio de crear redes sociales estridentes y cada vez más ponzoñosas va a continuar. Y cada vez están subiendo la vara o, como se hizo famoso en Colombia, corriendo cada vez más la delgada línea ética.