RAFAEL NIETO NAVIA | El Nuevo Siglo
Martes, 10 de Abril de 2012

Bogotá tiene tranvía


Santa Marta tiene tren, Bogotá tiene tranvía. ¡Ay qué tiempos aquellos señor don Simón! Las líneas del tranvía, inaugurado en 1884, tenían 14 kilómetros e iban de San Cristóbal hasta la Avenida de Chile y hasta la Estación de la Sabana. Era una época en que la ciudad tenía menos de un millón de habitantes, los niños jugaban en las calles, solamente unos privilegiados tenían carro, los taxis eran de los Lara y los buses de Sidauto. Hoy Bogotá no tiene tranvía por cuenta de la turbamulta del 9 de abril y del alcalde Mazuera -fueron reemplazados por unos buses rojos que llamábamos “borradores”- y Santa Marta no tiene tren por culpa del presidente Barco.
La ciudad es otra, por supuesto, con ocho millones de personas, casi todos inmigrantes, donde el tráfico es un caos y el niño que salga solo a la calle corre riesgos altísimos. Con una inmensa mayoría histórica de alcaldes incompetentes y politiqueros, el avance se ve lejano.
El alcalde Petro ha propuesto varias alternativas de tranvía, incluyendo una que llegaría a Zipaquirá y que sería, más bien, un tren de cercanías. También una línea de tranvía -lo llaman metro ligero como si les diera miedo decir “tranvía”- en vez de la ALO. (¡Error! Esa avenida canalizaría el tráfico pesado que solamente pasa por Bogotá y que no podemos montar en un tranvía) y ahora lo propone, en vez del TransMilenio ligero, para la séptima.
A mí me gusta el tranvía en la ALO, en vez del TransMilenio pero sin eliminar la avenida tan necesaria.
Para la séptima el tranvía es la solución. No sé por qué hablan de USD 15 millones el kilómetro. ¿Será que esa cifra incluye serruchos, quiebras de los contratistas, demoras infinitas y demás? Pero aun así, yo estaría dispuesto a pagar la valorización que me llegue a corresponder, sujeto a algunas condiciones: que el tranvía tenga una planta eléctrica propia quemando basura -los “borradores” eléctricos se varaban cada vez que se iba la luz o sea a todas horas-; que vaya de sur a norte por la séptima hasta encontrarse con el de la ALO; que regrese de norte a sur por la carrera trece y luego por la décima; que pare solamente cada kilómetro; que se eliminen las busetas por esas rutas y que viaje por una zona arbolada.
Los tranvías en Europa -modernos, eficientes y rápidos- son un maravilloso sistema de viaje urbano, que no contamina y que le gusta a la gente. Así que, adelante alcalde con ese proyecto.
Coda. No hay peor ciego que el que no quiere ver. Volvieron los de los sindicatos -esta vez uno que nadie conoce- a hacer propaganda contra el Estado en Europa. Es sabido que de los “sindicalistas” muertos algunos ni siquiera eran miembros de un sindicato y otros murieron en accidentes o asesinados por un marido celoso. La tasa de muertes en el gremio es más baja que la del ciudadano corriente.