Cada nuevo año surgen algunos intelectuales que se lucen recordando obras leídas, acompañadas con brillantes anécdotas para deslumbrar a sus queridos contertulios.
Para nadie es un secreto que entre las obras preferidas, que mencionamos en cada conversación, es “El Principito”, narración del escritor Antoine de Saint-Exupéry, cuyo contenido es la historia de un pequeño príncipe que parte de su asteroide a una travesía por el universo, en la cual descubre la extraña forma en que los adultos ven la vida, comprendiendo el valor del amor y la amistad.
Mi invitación es para que iniciemos una travesía por el universo, en compañía de nuestro sabio principito, utilizando sus inteligentes diálogos.
I-PRINCIPITO - “Ignoraba que, para los reyes, el mundo estaba muy simplificado. Todos los hombres son súbditos. ¿Os obedecen las estrellas? preguntó el principito al rey.
REY: Obedecen inmediatamente. Jamás tolero una indisciplina. La autoridad reposa en primer lugar, en la razón. Si ordenas a tu pueblo que se eche al mar, hará la revolución. Yo tengo derecho a exigir obediencia porque mis órdenes son razonables. Te nombro entonces Ministro de Justicia.
PRINCIPITO: “¡Pero no tenemos a nadie a quien juzgar!
REY: Te juzgarás a ti mismo. Es lo más difícil. Si logras juzgarte bien, eso quiere decir que eres un verdadero sabio”.
II-PRINCIPITO: “Que chistoso, lleva Ud. un sombrero.
VANIDOSO: Es para saludar a los que me aclaman. Desgraciadamente no pasa nunca nadie por aquí.
PRINCIPITO: Las personas son bien raras”
III-ZORRO (AMISTAD):
Zorro pide al príncipe ser domesticado, “así tendremos necesidad del otro. Serás entonces el único del mundo para mí. Yo seré también para ti el único en el mundo. Mi vida se iluminará. Conoceré un ruido de pasos diferente a los otros. Los otros pasos harán que me oculte, los tuyos me llamarán musicalmente.”
En el siglo XXI, nos encontramos en otro universo muy diferente.
Nuestro planeta se destruye. Sufrimos un cambio climático que demuestra cómo el calentamiento global está atacando con fuerza el derretimiento de los glaciares, blanqueamiento de corales, pérdida de playas, erosión costera, eventos extremos y animales en peligro.
Un Congreso desprestigiado, en el cual los parlamentarios reciben un aumento desmesurado del sueldo. Cada que se propone una reforma constitucional sobre disminución o congelamiento de sueldos la pasan por alto olímpicamente. Pero con el reajuste, derraman lágrimas de cocodrilo, lamentándose por el sufrimiento del pueblo colombiano.
Vladdo lo ejemplariza magníficamente en una de sus caricaturas: “Los congresistas somos los representantes del pueblo, pero no somos el pueblo”.
Instituida la JEP, componente de justicia del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y no Repetición, cuya misión, es satisfacer el derecho de las víctimas a la justicia y a la verdad.
Sin embargo las víctimas han sido ignoradas, mientras que los victimarios continúan recibiendo toda clase de prebendas. En Colombia cada día se registran masacres masivas de líderes sociales.
Pidamos entonces, que en este nuevo año surja un principito sin ambiciones populistas, alejado de toda corrupción.