Ha finalizado la exposición y análisis de los artículos divulgados por Gabriel Misas Arango (editor) en Desarrollo Económico y Social en Colombia. Siglo XX (Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá, 2001). A continuación, aparecen opiniones finales de Álvaro Camacho y el editor –contribuyó con escrito personal- con un mérito especial: los conceptos sobre el siglo XX  son pertinentes para contemplar las perspectivas del XXI. Misas señalaba que Colombia era un “país conflicto” y tal lugar le fue cedido a Venezuela. El narcotráfico empeoró, en ruptura de tendencia previa, y conviene una explicación del Gobierno Nacional, aunque medidas como acuerdos con campesinos y radicación forzosa de cultivos marchan bien; es tema sensible con USA. Parece que está funcionando el control de la  competencia en los mercados y la detección y combate coordinado a la corrupción.

Álvaro Camacho ubicó la conquista de la democracia como el problema principal, destaca el predominio de la irracionalidad, rebusque, individualismo, desigualdad, inequidad, calidad de la educación, daño al medio ambiente, índice de desarrollo humano inferior al de Chile, Costa Rica, Venezuela, Panamá y México, esperanza de vida, relaciones entre colombianos y de colombianos con el Estado, total impunidad, prevalencia de intereses privados, masacres frecuentes, informalidad, baja confianza y solidaridad, cita entidades corruptas por caciquismo y gamonalismo, el narcotráfico ya no es problema delictivo y lo es del Estado, se hablaba de Narcoestado, “Estado problema y paria”, dependencia en alto grado de USA, choque de élites. A corto plazo se debía resolver el problema de la paz en que la población civil era el objetivo y objeto de la guerra.

Evaluando a Camacho se destacan  el avance hacia la paz y el alivio consiguiente en la población civil, mejoría en alfabetización, cobertura educativa, el programa Ser Pilo Paga, reducción en pobreza extrema aunque Colombia siempre queda mal en comparaciones internacionales sobre distribución equitativa del ingreso, capital, tierra, en fin, estadísticas sobre inequidad, desigualdad. Ya no se habla de Estado Fallido, Narcoestado (aunque el problema sigue), continúa la dependencia de USA, el dominio de lo privado, se destapan casos más y más graves de corrupción. Sigue el clientelismo, continúan los choques entre élites políticas y están pendientes las reformas agraria, política y judicial y mayor progreso en contrarrestar la corrupción.