La Feria del Libro, FilBo de 2018, ha sido el lugar de encuentro de jóvenes y viejos, donde se despiertan pasiones contrastadas ante el acoso incesante de la tecnología. Durante diez días de Feria, miles de personas han acudido a la cita que hoy no solo es de libros y de literatura, sino que en su entorno están los youtubers, los juegos, las charlas y las conferencias.

Se creía que hoy cuando la tecnología se está tomando todas las actividades, se creía que los jóvenes no se interesaban por la compra de libros, pero en esta Feria se ha demostrado que todavía existe el interés entre estudiantes, mujeres y hombres, a pesar de que si aparecen los youtubers, nada se puede hacer.

En este primer balance de la Feria, sin duda el pabellón de Argentina ha sido quizá el más visitado, ante la variedad de autores y de títulos. Para Nicolás Pascuchelli, agregado Comercial de la Embajada de Argentina en Colombia, el pabellón ha sido uno de los más visitados por los asistentes a la FilBo. “Cifras que hemos podido corroborar y contrastar con los organizadores de la feria, indican que entre un 35 y 40% de las personas que por estos días visitan Corferias, entran a curiosear lo que tiene Argentina”, dijo.

Los números de la librería también están superando las expectativas. “Se han vendido alrededor de 5.500 ejemplares, es decir, un promedio de 900 libros por día”, agregó. Como datos curiosos, la obra argentina más vendida durante la mitad de la FilBo, ha sido “Rayuela”, de Julio Cortázar, con 166 ejemplares comprados; le sigue Alejandra Pizarnik, con “En esta noche, en este mundo”, con 61 copias; y “Cuentos completos”, de Jorge Luis Borges, 33 ventas.

Por conferencias, de las 110 preparadas por el país invitado de honor, ya se han realizado 50 charlas en el auditorio del pabellón, con una asistencia alrededor de 170 personas por cada panel. Las más taquilleras han sido las de los escritores Eduardo Sacheri, Liniers, Pablo Bernasconi, Claudia Piñeiro y Adela Basch.

Sin duda los conversatorios entre escritores, editores de libros y personalidades, han despertado la atención del público, como lo hizo Mario Vargas Llosa a su paso por el recinto ferial. Esto significa que la FilBo es mucho más que una vitrina de libros.