Museo de Arte del Tolima celebra su aniversario con homenaje a Botero | El Nuevo Siglo
LA EXHIBICIÓN podrá verse de martes a domingo de 10:00 a.m. a 12:30 p.m. y de 2:00 a 6:00 p.m. /Foto: Cortesía Museo de Arte del Tolima
Domingo, 21 de Enero de 2024
Redacción Cultura

EL MUSEO de Arte del Tolima (MAT) celebra su aniversario número 20 años con un homenaje a la vida y obra del maestro Fernando Botero, a través de la exposición “Botero y su tiempo en el arte colombiano”, muestra realizada gracias al apoyo de la Gobernación del Tolima, la Dirección de Cultura Departamental, a Museos, coleccionistas y galeristas como la Galería Duque Arango, LGM Galería, Museo Rayo, Santiago Botero, Manuela Echeverry, Mariú Vanegas y Alejandra Matiz.

El Museo de Arte del Tolima se encuentra ubicado en Ibagué y desde hace 20 años cumple la misión de conservación, preservación y exhibición de las diferentes colecciones que alberga con el ánimo de promover el desarrollo de las artes plásticas y visuales en la región, a través de programas de formación de públicos y una amplia actividad cultural.

“Botero y su tiempo en el Arte Colombiano” hace un reconocimiento al maestro Botero, con un recorrido por sus obras y de otros artistas que durante las siete décadas de su carrera profesional lograron una cierta trascendencia en el contexto internacional, como Doris Salcedo, Beatriz González, Antonio Caro, Darío Morales, Luis Caballero, Leo Matiz y David Manzur, entre otros. La muestra reúne más de 40 obras en pintura, dibujo, gráfica y escultura. La muestra estará disponible hasta finales de este mes.

“Antes de la era Botero la relación de los artistas colombianos con el arte internacional era muy precaria. Desde el siglo XIX unos pocos privilegiados salían a estudiar a Europa, Estados Unidos, México o Chile y participaban de una que otra exposición fuera y regresaban a desarrollar sus carreras en Colombia. Así fue hasta los años 50 que, inspirados por otros artistas del continente y el impulso moderno, además de Botero, una decena de artistas colombianos viajan con la intención de hacer carrera fuera del país”, señaló Darío Ortiz, presidente del Consejo Directivo del museo y uno de los curadores de la exposición.

Es importante recordar que en el 2008 la exposición “Botero en Ibagué” conmocionó no solo la historia del arte tolimense, sino también de este museo que había abierto sus puertas pocos años antes. Hoy una vez más se puede apreciar un conjunto considerable de sus valiosas obras. María Márgareth Bonilla Morales, directora del MAT, destacó: “es un orgullo y un privilegio para nosotros los tolimenses, tener nuevamente importantes esculturas y pinturas del maestro, y justamente en la celebración de nuestros 20 años”.

Dos décadas

Paralelo a esta muestra, los visitantes podrán encontrar la exposición “Que 20 años no es nada”, una curaduría que hace un recuento breve del fortalecimiento que han tenido las colecciones que salvaguarda el MAT durante estas dos décadas, resumidas en sus tres ejes principales: regional, nacional e internacional. Esta muestra permanecerá abierta al público hasta el 25 de febrero.

El pasado 15 de septiembre falleció en Montecarlo el maestro Fernando Botero, el artista colombiano con mayor reconocimiento de nuestra historia. Su vida fue una carrera llena de éxitos descollantes, tanto a nivel nacional, como a nivel internacional.

Participó en el documental de Kassel de 1977, en la Bienal de Venecia de 1958 y fue ganador del Salón Nacional de Colombia y del Premio Guggenheim, entre muchos otros hechos notables. Expuso en algunos de los museos, galerías y ferias de arte más importantes del mundo. Sus esculturas monumentales se mostraron en las calles de las grandes capitales consolidando un formato inédito de exhibición, siendo vistas por millones de personas.

Sus obras han alcanzado récords históricos en las grandes subastas dentro del arte latinoamericano y se han editado libros en una decena de idiomas, pudiendo encontrarlos en prácticamente todas las librerías alrededor del globo. Las donaciones de grandes maestros internacionales que hizo al Museo de Antioquia y al Banco de la República lo convirtieron en el mayor mecenas del arte que ha habido en Colombia.