El ejercicio físico y mental regular, las visitas preventivas al veterinario para chequeos y, sobre todo, una alimentación adecuada, son pilares fundamentales para brindarles una buena calidad de vida a las mascotas. En este sentido, la nutrición desempeña un papel crucial para garantizar su bienestar integral, pues si no es completa y balanceada, puede conllevar a problemas en el sistema digestivo.
Los alimentos ricos en fibra para gatos se han convertido en un producto imprescindible para estas mascotas con problemas gastrointestinales.
Un componente esencial en la dieta de los peluditos es la fibra dietaria total (FDT), nutriente que, en el caso de los perros, debe estar entre 2,5 % y 5 % en su esquema nutricional, mientras que, para los gatos, entre 4 % y 6 %, jugando un papel fundamental en la salud digestiva y general, ya que aporta una serie de beneficios que la convierten en un indispensable dentro de los alimentos concentrados y húmedos.
Por lo anterior, el médico veterinario Carlos Cifuentes, del Pet Food Institute, destaca cuatro beneficios de la FDT para los felinos:
Regula el tránsito intestinal: Incrementa el volumen de las heces y facilita su paso a través del tracto digestivo, lo que resulta eficaz en la prevención del estreñimiento y la diarrea.
Promueve una microbiota saludable: Al fermentarse en el intestino grueso, sirve como fuente de alimento para las bacterias benéficas, permitiendo el mantenimiento de un equilibrio favorable en la microbiota intestinal. Esta simbiosis mejora la digestión y la absorción de nutrientes, fortaleciendo el bienestar digestivo.
Controla el peso corporal: Aumenta la sensación de saciedad, lo que se traduce en una regulación del apetito. Este mecanismo de control del peso, resulta crucial en la prevención de la obesidad tanto en perros como en gatos, promoviendo así un estado óptimo de salud.
Reduce el riesgo de enfermedades: El impacto protector de la fibra fortalece las defensas, ya que al incluirla en la dieta de las mascotas, se correlaciona con una disminución significativa en el riesgo de patologías crónicas como la diabetes, afecciones cardíacas y ciertos tipos de cáncer. Este efecto protector, subraya la importancia de la fibra como un componente esencial para una vida saludable y longeva.
El experto afirma que la FDT se encuentra en una gran variedad de ingredientes, los cuales, en su mayoría están incluidos dentro de la receta de los alimentos de los peluditos, mientras otros se pueden brindar como premios o snacks. Entre ellos sobresalen:
- Frutas y verduras: Manzana, zanahoria, plátano, brócoli y calabaza.
- Cereales integrales: Como el arroz integral, avena y trigo integral.
- Legumbres: lentejas, garbanzos y habas.
- Prebióticos y probióticos: Estimulan el crecimiento de las bacterias beneficiosas en el intestino.
Sin embargo, es aconsejable asistir con el médico o nutricionista veterinario para consultar sobre la cantidad de FDT adecuada en la dieta de su mascota, ya sea por medio de un alimento concentrado y balanceado húmedo o seco, además, es vital que siempre tenga acceso a agua fresca y potable.
Recuerde que la forma de alimentar a su peludo es vital para mantener su bienestar, pues ellos necesitan más de 40 nutrientes esenciales, y esto es difícil de lograr con sobras de mesa o comida casera, por lo que brindarle un alimento comercial para mascotas procedente de Estados Unidos, garantiza la mejor y más segura nutrición para una vida saludable y feliz.
También hay que tomar en consideración que los gatos con diabetes se les suelen dar alimentos ricos en proteínas y bajos en carbohidratos, pero también pueden beneficiarse de los alimentos ricos en fibra si son propensos a tener sobrepeso o sufren ciertos tipos de trastornos gastrointestinales.
Algunas fibras hacen que la absorción de nutrientes sea más lenta, permitiendo que los azúcares de los almidones se absorban más despacio y estabilizando los niveles de azúcar en sangre. Los gatos con sobrepeso o los que son propensos a subir de peso también se pueden beneficiar de los alimentos ricos en fibra, ya que estos pueden hacer que se sientan más llenos que con su alimento habitual, y la pérdida de peso puede ayudar a controlar la diabetes.