EN FOTOS | 'Millos' se quedó con las manos vacías

Foto El Nuevo Siglo - Andrés Rot

Viernes, 12 de Octubre de 2018

Redacción Deportes

La última ilusión que alimentaban a los aficionados de Millonarios de celebrar un nuevo título este año se esfumó la noche de este viernes con la eliminación en la Copa Águila a manos del Once Caldas, luego de empatar 1-1 en El Campín.

Los azules llegaron en desventaja luego de caer una semana atrás por 0-1 en Manizales y aunque alimentaron la esperanza de clasificar con una anotación de Juan Camilo Salazar, no supieron defender la ventaja y terminaron cometiendo errores que le valieron la sanción de una pena máxima que fue convertida por César Amaya y de ahí en adelante todo fue desespero.

Los dirigidos por Miguel Ángel Russo antes habían sido eliminados de la Copa Suramericana nada menos que por Santa Fe, en el cobro desde los 12 pasos. Esa fue su primera gran frustración y la segunda, anoche. Pero hay otra que parece inevitable y solo un milagro cambiará el rumbo del destino.

En la Liga Águila los celestes suman 15 puntos y para clasificar requieren como mínimo 12 más de 15 posibles, pero el rendimiento mostrado, el mal funcionamiento y el pobre nivel de algunos jugadores no parecen ser los mejores aliados para lograrlo.

El Millonarios de anoche, y el de casi todo el torneo ha sido un equipo más de ganas que de orden defensivo y que con la ausencia de Jhon Duque en el sector medular perdió recuperación de balón y en consecuencia, seguridad y respaldo para el cuarteto posterior.

Anoche los celestes fueron un equipo que salió a buscar el resultado y después de que se fue arriba en el marcador perdió el orden, cosa que no es nueva y que le ha valido no ganar un solo partido en lo que va de este semestre en El Campín.

Las ganas no siempre son suficientes y del Millonarios avasallador, de juego vertiginoso que ganó el título en diciembre pasado, queda muy poco porque se apostó a darle manejo y ello le quitó profundidad, llegada y sobre todo, definición. Los de Russo hoy son frágiles en defensa, poco generadores de fútbol ofensivo y no definen.