El pesista recibió la tan anhelada medalla de Río 2016, luego de una prolongada espera por inconvenientes con otro competidor
Tras dos años de espera, Luis Javier Mosquera recibió por parte del Comité Olímpico Internacional la medalla de bronce que le fue otorgada en las Olimpiadas de Río 2016, luego de que se le comprobara al competidor que quedó en tercer lugar, que se había dopado.
En medio de la euforia y la celebración por tener en sus manos la medalla, Mosquera atendió a EL NUEVO SIGLO para hablar de todo, el bronce, la lucha diaria que tiene por volver a su mejor forma, su familia y la ilusión, como dice él “ganar la guerra” en Tokio 2020.
EL NUEVO SIGLO: ¿Por fin tiene la medalla en sus manos?
LUIS MOSQUERA: Gracias a Dios se me da la oportunidad de tener la medalla ya, es un impulso para seguir luchando, para seguir entrenando fuerte, con la misma verraquera que tenía y luchando para poder clasificar a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
ENS: Hace tres años en Río, cuando terminó su competencia siendo cuarto, hablábamos del proceso que llevaba y de lo tranquilo que estaba por el resultado, ¿hoy que es medallista oficialmente, cómo se siente?
LM: Hace tres años, cuando quede cuarto, lo tomé con mucha tranquilidad, porque había hecho las cosas más que bien, yo llegaba de una cirugía de hernia discal que me había parado en seco y me había puesto en duda para las Olimpiadas, frenando todo mi proceso, que venía muy bien, a dos meses de los juegos estuve a punto de tirar la toalla, de renunciar, de venirme de Brasil, era muy duro, entrenar con el dolor de estar recién operado, pero competí y di todo, quedé tranquilo, luego me dicen que soy medallista olímpico, Dios lo quiso así, la verdad estoy feliz y agradecido.
ENS: Después de los Olímpicos, que era probablemente su mejor momento, se vuelve a lesionar…
LM: Me lesiono en el mejor momento de mi carrera deportiva, justo después de que me dan la noticia de que era medallista olímpico, venía con una fuerza y un talento que podía llegar a ser campeón mundial en 2017 sin problema, pero lamentablemente tuve una lesión de rodilla que me paró y tuve que hacer dos cirugías, meniscos y tendón, entonces fue difícil, ha sido muy difícil para decirle la verdad, de la espalda me había recuperado rápido, seis meses y llegué a Olímpicos, en esta sí ha sido duro, llevo dos años intentando pararme, me paro, me caigo, pero nunca me rindo, siempre voy con la misma fe, con el mismo pensamiento para poderme recuperar e ir a los Juegos Olímpicos de Tokio, con la misma verraquera con la que fui a Río.
Recuperación
ENS: ¿Qué ha pasado en este tiempo de recuperación?
LM: Han pasado muchas cosas muy buenas, también malas, pero son más las buenas que las malas, ya tengo dos hijos, tengo esposa, Michelle, que ha estado en las buenas, pero sobre todo en las malas, que llegó en el mejor momento, cuando me lesioné, y me toca recuperarme y es la que ha estado ahí firme conmigo, motivándome, estoy agradecido con Dios porque han llegado a mi vida bendiciones muy grandes, me ha quitado cosas, pero me ha dado más de lo que me ha quitado.
ENS: ¿Todavía tiene el gimnasio en Cali?
LM: Es una de las cosas que decidí parar, después de la cirugía, la presión que tenía para recuperarme rápido me tenía muy estresado y no quería una carga todavía, apenas tengo 24 años y mucho futuro en este deporte así que después de que me retire decido si me dedico a ser empresario.
ENS: Parte de la recuperación de la lesión lo ha llevado a retomar sus raíces, a los inicios, ¿volvió al gimnasio de pesas de la liga del Valle a entrenar?
LM: Ha sido muy importante, eso te traslada a lo que era antes, a cuando era un niño, cuando era un muchachito, que salía a entrenar todos los días, que en la calle le decía a los compañeros que quería ser campeón del mundo, eso sigue intacto, la cirugía hizo que todo eso volviera al corazón y a los pensamientos. Allá entreno con Jhonatan Rivas, quien ha sido importante, él estaba lesionado también, nos operaron juntos, el sí se pudo recuperar, a mí me toco volver a operarme pero pues siempre ha estado ahí para apoyarme en todo el tema de la recuperación.
ENS: Vienen los Panamericanos en Lima, Perú, ¿cómo va la preparación física y mental?
LM: En lo mental, estas dos lesiones que tuve me volvieron un campeón de verdad, diría yo, te voy a decir una cosa, me he caído como siete veces y me he levantado como 10, con ñapa y todo, mentalmente estoy muy fuerte, vamos al Panamericano con todas las ganas, hay rivales muy fuertes pero yo voy a demostrar de qué estoy hecho, voy con mucha humildad a tratar de ganar, el camino es largo, todo lo que va a pasar son batallas que me van preparando para la guerra que será en Tokio 2020.
ENS: ¿Llegará a las Olimpiadas en el mejor momento en términos de madurez física y mental?
LM: Voy a llegar con 25 años, ya tuve la oportunidad de ser medallista olímpico a los 21 años y ahora quiero ratificar, ganar una medalla en Tokio, tengo muchas ganas de lograrlo, siempre me ha gustado ganar, sé perder pero prefiero la victoria. Me veo con muchas ganas de superarme, he aguantado el dolor propio del rigor del entrenamiento, pero no importa, sigo con todas las ganas.
ENS: Nos vemos en Lima, pero sobre todo nos vemos en Tokio…
LM: Así será, allá nos vamos a ver, le agradezco por estar pendiente del deporte, de mi carrera, espero que en Lima y Tokio nos toque celebrar.