Las economías de Colombia, Chile y Perú, que son las que han mejorado su crecimiento y están mostrando fuerza, tienen en medio climas políticos que están aportando a la volatilidad en los mercados, de acuerdo con diferentes bancos de inversión, así como la calificadora de riesgo crediticio Fitch Ratings. Analistas expresaron preocupaciones por políticas populistas, presiones en las finanzas públicas y malestar social.
“El intenso ciclo electoral de la región andina aumenta la incertidumbre fiscal en medio de las crecientes presiones del gasto social”, escribieron analistas de Fitch Ratings. Chile celebra elecciones a finales de este año, Colombia lo hará a principios de 2022 y recientemente ha asumido un nuevo gobierno en Perú.
Indican que “la tensión política y el descontento social, que pueden obstaculizar el crecimiento o la consolidación fiscal, se estaban acumulando antes de que la pandemia pusiera de manifiesto la debilidad de los sistemas de salud y las redes de seguridad social, y la desigualdad de ingresos”.
Colombia
Los analistas indican que el PIB de Colombia creció 17,6% en el segundo trimestre con relación al mismo periodo del año pasado, sin embargo, en la comparación intertrimestral, se registró una caída de 2,4%, una contracción mayor a lo esperado por analistas. “La manufactura, la construcción y el comercio mayorista y minorista mostraron fuertes caídas en la producción en el segundo trimestre”, apuntó el estratega de mercados para el banco de inversión Mizuho, Luciano Rostagno.
Sostuvo que “esperamos que la economía colombiana gane impulso en los próximos trimestres. Debemos tomar en cuenta, sin embargo, que la incertidumbre política sigue siendo un gran viento en contra y podría frenar las inversiones”.
“Las propuestas de reforma fiscal fueron revisadas después de una reacción popular”, agregó la agencia de riesgo. Cabe recordar que Fitch recortó la calificación de Colombia este año, lo que ocasionó la pérdida del grado de inversión de su deuda.
Chile
Según datos oficiales, la economía chilena se expandió 1% en el segundo trimestre del año en comparación con el trimestre anterior. Esto implica una ligera desaceleración si se compara con el alza de 3,4% en el primer trimestre, la cual se debe al aumento de infecciones visto en marzo, el cual obligó a las autoridades a reintroducir medidas de confinamiento. Pero fuerzas económicas como el consumo privado, el gasto público y la inversión siguieron avanzando.
“De cara al futuro, otra ronda de retiro de pensiones, tasas de interés aún bajas, una fuerte demanda mundial de cobre y una destacada campaña de vacunación deberían ayudar a que la economía cobre impulso”, sostienen.
Por su parte, Fitch hizo énfasis en su reporte a las políticas públicas que se promueven desde el Congreso: “El proceso de reforma constitucional más claramente definido de Chile ha dado a la frustración popular una salida institucional, pero el Congreso ha iniciado medidas populistas, como retiros de pensiones, y la carrera presidencial sigue abierta”. Fitch recortó la calificación de la deuda soberana de Chile durante la pandemia, pero retiene el grado de inversión.
Perú
La economía peruana también se vio afectada por restricciones de movilidad a principios del segundo trimestre, por lo que analistas esperan que el PIB trimestral, el cual se publicará el próximo lunes, se mantenga cercano al nivel del trimestre anterior.
“La actividad siguió mostrando en junio una tasa de crecimiento interanual elevada, incluso ubicándose por encima del nivel que alcanzó en junio de 2019 (precrisis sanitaria)”, dijeron analistas del banco de inversión BBVA. ”Y el empleo sigue también una senda de normalización, pero la debilidad de las confianzas de los agentes del sector privado probablemente afectará en adelante el gasto que estos realizan, moderando tanto la recuperación de la actividad como la del empleo”.
La debilidad en la confianza se refiere a la incertidumbre que inversores han expresado en torno a Perú a partir de la llegada al poder del presidente Pedro Castillo. “La incertidumbre política sigue siendo alta en Perú luego de la elección de Pedro Castillo en una plataforma populista de izquierda”, opinaron los analistas de Fitch.