Caída histórica del precio petrolero | El Nuevo Siglo
Foto archivo Europa Press
Lunes, 20 de Abril de 2020
Agencia Europapress

El derrumbe del petróleo llegó ayer a niveles históricos: el barril de crudo WTI, que se intercambiaba a US$60 por unidad a inicios de año, se hundió por completo y terminó la jornada en -US$37,63, perdiendo casi US$60 respecto a la jornada del viernes.

La angustia del mercado se presentó cuando los inversores y especuladores pagaban para encontrar compradores en momentos en que las capacidades de almacenamiento llegan a su límite en Estados Unidos.

En efecto, los tenedores de contratos para mayo (que expiran hoy) deben encontrar compradores para el petróleo físico lo antes que puedan. Pero como las reservas están casi al límite en EU, deben erosionar los precios para colocarlos.

El precio del barril de petróleo para entrega en mayo en Nueva York se desintegró el lunes, frente a US$20,43 del barril para junio, un fenómeno que se debe en parte por los contratos a futuro.

Esta gigantesca diferencia entre estos dos contratos a plazo se explica por las decisiones de inversionistas y especuladores. Cuando compran estos contratos a futuro, se comprometen a hacerse del crudo físicamente a un precio y fecha determinados con anticipación.

 

Pocas opciones

Así, para el contrato con vencimiento en mayo del WTI, los inversores tienen dos opciones: vender el petróleo o almacenarlo para venderlo más tarde.

Sin embargo, las reservas de crudo en EU están cerca del límite, tras un fuerte aumento en las últimas semanas, lo cual hace el almacenamiento de oro negro más difícil y caro.

La Agencia de Información sobre Energía (AIE) de Estados Unidos aseguró que las reservas de petróleo subieron en 19,25 millones de barriles la semana pasada en el principal productor y consumidor mundial de oro negro. Se trata del mayor incremento desde que se llevan estas estadísticas.

La consultora Rystad Energy consideró que no queda espacio para más de 21 millones de barriles en la terminal de Cushing (Oklahoma, sur), donde se almacena el crudo referencia del WTI.

Ante esta situación inédita, debido a la caída de la demanda por la pandemia de coronavirus y un mercado con sobreoferta, los barriles para entrega en mayo perdieron todo su valor y los inversores quieren deshacerse de ellos y tienen que pagar para hacerlo.

“Actores de talla media pagan a los 'compradores' para deshacerse de sus volúmenes de petróleo porque el límite físico de reservas está por alcanzarse. ¡Y pagan caro!”, explicó la analista Louise Dickson, de Rystad Energy.

 

Las quiebras

Para esa especialista esto significa que “cierres costosos, incluso quiebras, podrían costar menos caro a algunos productores que pagar decenas de millones de dólares para deshacerse de lo que producen”.

Quienes pueden almacenar y vender más tarde, apuestan a que las cotizaciones subirán después, y que el consumo mundial de crudo y productos refinados retomará con la reactivación de la economía.

Esta situación se traduce por un fenómeno de reporte, con precios que suben a medida que el plazo del contrato es más lejano en el tiempo.

Por eso, el contrato de WTI para entrega en julio terminó en US$26,28 y el de agosto en US$28,51.

 

La bolsa

Esta situación del crudo en Nueva York, hizo que Wall Street cerrara en rojo y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, perdió 44% tras una sesión marcada por el histórico desplome del precio del petróleo de Texas hasta terreno negativo, un efecto visible del impacto de la pandemia de Covid-19 que ha sembrado el pesimismo entre los inversores.

Al término de las operaciones en la Bolsa de Nueva York, el Dow aceleró sus pérdidas y recortó 592 puntos, situándose en 23.650 puntos, arrastrado por la aeronáutica Boeing (-6,70 %) y por las petroleras Exxon Mobil (-4,72%) y Chevron (-4,20%), entre otras grandes corporativas.

El indicador S&P 500 descendió un 1,79% o 51,40 puntos, hasta 2.823 enteros; y el índice compuesto del mercado Nasdaq retrocedió un 1,03% o 89,41 puntos, hasta 8.561 enteros.

 

Impacto en Colombia

El presidente de la Asociación Colombiana de Petróleo, Francisco José Lloreda, dijo  que “el problema de fondo es la caída en la demanda global. Hoy hay 187 países con medidas de aislamiento, de distinto tipo, que explican lo que está sucediendo. Solo en Colombia, la demanda de combustible líquido ha caído en más del 60% y en el caso del Jet Fuel de aviación, 95%. Es difícil prever cómo serán los  procesos de ‘reapertura’ de cada país, pero seguramente van a ser graduales y con diferencias. Y en todo caso, no pareciera que, al menos en lo que resta del año, se vaya a regresar a los niveles de demanda previos al aislamiento”.

Además, sostiene que “es cierto que la caída del WTI a un nivel incluso negativo obedece a que debían liquidarse futuros con esa referencia, por lo cual se espera que posteriormente vuelvan a subir. En cuánto y por cuánto tiempo, es difícil saberlo. Ahora bien, si no hay decisiones de un mayor recorte en la producción, señales de recuperación de la demanda o de la capacidad de almacenamiento de crudo en la región van a caer de nuevo los precios de esta referencia”.

Indica que “con una caída en la demanda del 30% los precios difícilmente van a repuntar rápido o van a llegar a los niveles que se requieren en el caso de Colombia, un país costoso en su producción comparado con la gran mayoría de países. Recordemos que el país requiere precios en un rango de US$40 - US$45 por barril Brent, si pretendemos que no se afecten la exploración y la producción”.

Sostiene Lloreda que “lo más grave es que la capacidad de almacenamiento internacional de crudo está llegando al límite. Pareciera que en el mercado occidental ya se copó. Podría ser cuestión de semanas para que ocurra lo mismo en otros mercados, afectando la referencia Brent, la que más usa Colombia. Por lo anterior, se requieren medidas de fondo, de lo contrario tendremos campos cerrados con un grave impacto para las finanzas de la Nación y las regiones, este y el próximo año”.