UN CRECIMIENTO de 1,7% registró la economía colombiana en el trimestre entre junio, julio y agosto, de acuerdo con el indicador Nowcast que realiza periódicamente el Bancolombia.
Según el análisis, conocido por EL NUEVO SIGLO, este resultado “evidencia una desaceleración modesta del crecimiento frente a la expansión del Producto Interno Bruto (PIB) del segundo trimestre del año, donde las cifras preliminares revelaron una expansión de 2,1% anual”.
En este mismo informe, los investigadores señalan que “los pronósticos de crecimiento del PIB para el tercer trimestre, a partir de nuestro indicador muestran un avance de 2,3%, superior al consenso de los analistas del mercado para el mismo periodo (1,9%) y a nuestro pronóstico base vigente (1,3%)”.
Apuntan que “la serie ajustada por efecto estacional de nuestro indicador revela que el nivel de actividad se estabilizó en agosto en el mismo nivel del mes previo, luego de crecer 2,8% mensual en julio. Con esto, la variación anual para agosto, puntualmente fue de 2,6%”.
Los rubros
Explican en el informe que “el balance sectorial del trimestre móvil terminado en agosto evidencia una moderación en los ritmos de expansión de gran parte de las actividades, siendo Administración Pública, recreación y agricultura los que presentan los mejores registros de crecimiento. Por otra parte, las actividades de minería, manufactura, construcción y comunicaciones se contraen en lo corrido de este tercer trimestre. Finalmente, el sector inmobiliario es el único que habría experimentado un fortalecimiento de su dinámica respecto al mes anterior”.
Según el DANE, el segundo trimestre de 2024 registró un crecimiento de la economía colombiana de 2,1%, con respecto al mismo periodo de 2023, situándose en las expectativas de los analistas que esperaban que el segundo dato del año se ubicara por cerca de 2%. Con ello, la dinámica de la economía colombiana está dejando atrás el bajo crecimiento alcanzado en los primeros tres meses del año, y aunque las cifras son inferiores a las del potencial de crecimiento, representan un cambio de tendencia.
Por su parte, la firma Corficolombiana, en un reciente análisis, dijo que “revisamos al alza el pronóstico de crecimiento del PIB de 2024 a 1,8%, desde 1,3%. En 2025, la economía crecería 2,6%, una tasa inferior a la necesaria para las necesidades del país en materia de reducción del desempleo y avance en la lucha contra la pobreza. Análisis esperado de los componentes de la demanda”.
Respecto al rubro de consumo privado, mencionó que “disminuimos la proyección de crecimiento a 0,4%, desde 0,9%, luego de la contracción del consumo privado de 0,1% anual en el primer trimestre y la todavía elevada carga financiera de los hogares. El desempeño del mercado laboral ha sido mejor de lo esperado y evitaría una dinámica más débil del gasto privado. Revisamos a la baja el pronóstico de tasa de desempleo nacional en 2024 de 11,0% a 10,4%”.
La inversión
Con relación a la inversión, la entidad sostiene que “va a moderar su ritmo de contracción, en línea con el mayor dinamismo del sector constructor y a pesar del bajo desempeño del sector industrial. Sin embargo, la tasa de inversión caería a 14,6% del PIB en 2024, su mínimo en al menos dos décadas, manteniendo los riesgos sobre el crecimiento potencial”.
De acuerdo con el gasto público, el informe de Corficolombiana destaca que “mejoramos el pronóstico de crecimiento a 3,6%, desde 3,3%, aunque con una alta incertidumbre asociada a la capacidad de ejecución presupuestal. Esperamos que el sector modere su desempeño durante el segundo semestre del año, apoyado en la base estadística más alta en el componente de remuneración salarial”.
En cuanto al comercio, aseguran que “las exportaciones registrarían un crecimiento moderado, en línea con la estabilidad de los precios internacionales de las materias primas de exportación y un aterrizaje suave de la economía global. Las importaciones, por su parte, mantendrán un desempeño débil. Actividad sectorial: desempeño débil y heterogéneo”.