EL PAÍS emprendió la transición energética para promover proyectos renovables; pero, esta no va al mismo ritmo con las declaraciones del Gobierno.
Esta fue una de las principales conclusiones que dejó el foro ‘Desafío de la Energía: conversación para un futuro sostenible’, organizado por Prisa Media, donde expertos destacaron la urgencia de abordar el desbalance entre la oferta y la demanda de energía.
A pesar de este potencial, el país ha enfrentado desafíos en su transición energética, como lo refleja su posición en el Índice de Transición Energética del Foro Económico Mundial. En 2021, Colombia ocupaba el puesto 29 a nivel global. En el último informe, perdió 10 puntos a nivel global y pasó del tercer al sexto lugar en América Latina.
Datos como este, confirman la importancia de continuar debatiendo sobre cómo fomentar una transición energética justa, sobre todo frente a un futuro que demanda cada vez más acciones concretas para enfrentar el cambio climático y garantizar la sostenibilidad ambiental y económica.
Uno de los principales desafíos estuvo relacionado con el desbalance entre la oferta y la demanda de energía en el país. En abril, por ejemplo, la demanda de energía a nivel nacional subió 5,31 % frente al mismo mes del año anterior, principalmente por el consumo de los hogares.
Según alertaron los expertos, el modelo energético actual no está preparado para asumir dicho aumento. Las limitaciones físicas del Sistema de Transmisión Nacional, fenómenos climáticos como El Niño y la excesiva dependencia de combustibles fósiles, son algunas de las razones principales.
Por otro lado, la Unidad de Planeación Minero Energética también reveló que el gran déficit de energía podría estarse presentando para 2027-2028, mucho más cerca de lo pensado.
Camilo Sánchez, presidente de Andesco, compartió sus reflexiones sobre la transición energética en Colombia, enfatizando que: “la transición energética es un camino, no una meta” y que se está abordando incorrectamente en Colombia.
Resaltó la importancia de reconocer y aprovechar las ventajas comparativas de Colombia: “debemos entender que poseemos ventajas comparativas que debemos utilizar. Colombia tiene petróleo, gas y minerales. No podemos dejarlos enterrados. Debemos utilizarlos en beneficio de los usuarios y de los colombianos”, afirmó.