La firma calificadora de riesgo Moody’s Investors Service reafirmó que no prevé bajar la calificación en grado de inversión ‘Baa3’ a las emisiones internacionales de bonos y a la deuda corporativa de Empresas Públicas de Medellín (EPM).

La última recalificación fue en marzo pasado y se mantiene este año. Sin embargo, analistas de la calificadora de riesgo Moody´s Investor Service dijeron que no se prevé un impacto inmediato en las calificaciones de EPM por la reciente crisis corporativa con el cambio de la Junta Directiva.

Con base en el proyecto Hidroituango, la empresa demandó a los constructores y a las aseguradoras por $9,9 billones alegando fallas en el proceso.

En concepto de los expertos, la conclusión de Hidroituango será crítica para la calificación de EPM y por lo tanto, no ve un impacto crediticio inmediato.

La agencia, dijeron, estará atenta a cambios en la política de desapalancamiento de la empresa antioqueña y de donde se esperan altos recursos.

En días pasados, Moody´s emitió su primera opinión formal sobre la crisis corporativa en EPM.

En ese  momento, aunque se presentó la rebaja de nota de Fitch Ratings, Moody’s, mantuvo la nota a EPM de Baa3, y señaló que “el posible cambio del objeto social  y la dimisión del directorio expone una frágil estructura de gobierno corporativo, bajo el 99,9% de control del Municipio de Medellín y la mayor exposición de la empresa a riesgos políticos”. 

Postura

En el mismo análisis, la firma señalaba que “la estructura débil de la Junta ha sido la misma durante varios años, pero en la práctica, y de conformidad con un Acuerdo General de Gobierno Corporativo vigente desde 2007, históricamente la municipalidad ha ejercido su poder de propiedad únicamente a través de la Junta Directiva”.

Por otra parte, y tras conocer el anuncio por parte del alcalde de Medellín y presidente de la Junta Directiva de EPM, Daniel Quintero Calle, de los nuevos integrantes del máximo órgano de dirección de la Empresa, el gerente de la empresa, Álvaro Enrique Rendón dijo que “quiero darles la bienvenida a nuestra Organización, destacar su conocimiento multidisciplinario que nos permitirá tomar las mejores decisiones en pro de la gente y reiterar mi compromiso inquebrantable con la ciudadanía, los empleados de EPM y sus contratistas”.

Indicó Rendón que “quiero reiterar mi agradecimiento y gratitud con los miembros salientes de la Junta Directiva por todos los servicios prestados y sus contribuciones durante el tiempo en que participaron de este organismo colegiado”.

Compromiso

En su carta pública, el Gerente de EPM dice que “el fortalecimiento del buen gobierno corporativo, el cumplimiento del Convenio Marco de Relaciones Municipio de Medellín-EPM, el respeto por la independencia de nuestra Junta Directiva, la gestión y cumplimiento de sus directrices y orientaciones; además de preservar la confianza del mercado financiero e inversionistas son compromisos que, desde mi posesión, asumí con determinación, guiado por los principios fundacionales de EPM hace 65 años y nuestra tradición de rigor técnico, jurídico, financiero y administrativo”.

Por otra parte y en un comunicado dirigido a la comunidad, “ante la más compleja crisis que afronta EPM en sus 65 años de existencia”, 285 exfuncionarios de EPM/UNE expresaron que “como empresa pública ejemplar, la entidad se debe a sus dueños que son los ciudadanos” y marcaron que “ni agendas políticas, ni grupos económicos deben tener cabida en su orientación y gestión”.

El comunicado, compuesto por 15 puntos, también se refiere a la reclamación legal sobre Hidroituango y a la propuesta del alcalde Daniel Quintero sobre el cambio de objeto social y señala que deben “provenir de los mecanismos institucionales internos y no de imposiciones de ninguna naturaleza”.

En materia de Junta Directiva, otro factor clave de la crisis institucional que vive la entidad, los exfuncionarios señalan que el nombramiento de los nuevos integrantes “es necesario para recomponer el camino y recuperar la confianza pública por EPM”, además que debe ser una conformación idónea, independiente y sin conflicto de interés.