Aunque el ministro encargado de Hacienda Diego Alejandro Guevara Castañeda, confirmó que el Gobierno cerrará 2024 cumpliendo la regla fiscal, con un déficit estimado del 5,6%, equivalente a $94 billones, en línea con el Marco Fiscal de Mediano Plazo, las cuentas que hacen los expertos y analistas ponen en duda ese objetivo.

Esta situación depende en gran medida del ajuste del gasto y de los recortes presupuestales que se han indicado en los últimos días. Algunos investigadores privados del sector financiero, señalan que aunque se mantiene la perspectiva de cumplimiento de la regla fiscal, no se pueden desconocer los riesgos a los que se enfrenta el panorama fiscal tanto en el corto como en el mediano plazo.

Estos riesgos tienen que ver los compromisos del Gobierno con la estabilidad macroeconómica y financiera del país. Así pues, en medio de que conlleva un esfuerzo de austeridad elevado, nuestros cálculos recientes apuntan a que, de mantenerse el ritmo de ejecución mostrado entre julio y octubre en la última parte de 2024, es posible que se logre mantener el gasto primario en un nivel lo suficientemente bajo para cumplir con la meta de la regla este año.

Los escenarios

De todos modos, para 2025, con riesgos aún importantes, el desafío sería menos pronunciado. En el escenario en que el Presupuesto 2025 queda en $523 billones, las estimaciones apuntan a que el riesgo de recorte de gasto podría ser de entre $33 y $40 billones, una cifra que no deja de ser inquietante, pero que luce menos retador que el recorte de casi $70 billones que se tendría que lograr en 2024.

Según los analistas, de cara al mediano plazo es inquietante el riesgo que surge por la aprobación del Acto Legislativo que reforma al Sistema General de Participaciones, ante lo cual será clave que se modifique la Ley de Competencias tan pronto como sea posible y de forma que equilibre los mayores recursos de las regiones con responsabilidades de gasto equivalentes.

Por otra parte, para el director de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, está en juego el cumplimiento de la Regla Fiscal por parte del actual Gobierno con esta determinación de un recorte de $12 billones. “Está en riesgo en cumplimiento de la regla fiscal. Es una mala noticia desde el punto de vista de lo que ha sido ese compromiso del Gobierno Nacional de cumplir la regla fiscal”.

El recorte

Por su parte, José Ignacio López, presidente de Anif, ratificó que no basta con ese ‘tijerazo’ a las cuentas del Gobierno y que terminará definiéndose por el ritmo de ejecución del presupuesto.

“Este recorte no va a ser suficiente para cumplir la Regla Fiscal y quizás el destino de si vamos a cumplir la Regla Fiscal o no, va a estar en función de la ejecución de los últimos meses del año”, anticipó López.

Como explica el director de Fedesarrollo, la estrategia no es la más adecuada y el mejor camino debería ser sincerar las cuentas. En ese sentido, el margen de maniobra lo tendría el Gobierno porque, según Mejía, en este último trimestre se suelen ejecutar una parte importante de los recursos.

“Muy seguramente lo que tendrá que hacer el Ministerio (de Hacienda) es apretar un poco la ejecución del presupuesto para evitar que haya una ejecución que imposibilite el cumplimiento de la Regla Fiscal. Es decir, subejecución del presupuesto, creo que no es la forma de hacer las cosas. Si hay una necesidad de recortar el presupuesto, lo mejor es sincerar las cuentas y no tratar, por otro lado, de ponerle trabas a la ejecución para evitar que haya un incumplimiento de la Regla Fiscal”, dijo Mejía.