La intensidad de las lluvias ocasionadas por el fenómeno de La Niña hizo que en octubre la producción de café de Colombia, mayor productor mundial de arábigo suave lavado, cayera 12%, a 888.000 sacos de 60 kg de café verde, desde el millón de sacos producido en el mismo mes de 2021.

En lo que va del año (enero-octubre), la producción superó los 9 millones de sacos, 10% menos frente a los casi 10,1 millones alcanzados en igual periodo anterior, y en los últimos 12 meses (noviembre 2021-octubre 2022), la producción rozó los 11,6 millones de sacos, 13% menos frente a los más de 13,2 millones cosechados un año atrás.

De acuerdo con la Federación Nacional de Cafeteros, el retroceso en la producción es causa del exceso de lluvias que se ha registrado de manera ininterrumpida durante los últimos 28 meses, lo que se traduce en exceso de agua, menor luminosidad y menores floraciones de los cafetales.

Asimismo, durante el último mes referenciado y en el que también se inicial el actual año cafetero, las exportaciones disminuyeron 5% a 942.000 sacos de 60 kg de café verde, frente a los 987.000 sacos exportados en el mismo mes de 2021.

Exportaciones

En lo corrido del año, las exportaciones cayeron 6% a poco más de 9,5 millones de sacos de 60 kg, frente a los más de 10,1 millones de sacos puestos en los mercados internacionales un año atrás. Y en los últimos 12 meses, las exportaciones cayeron 7% a 11,8 millones de sacos desde los 12,7 millones de sacos de un año antes.

Por otra parte, ayer la Federación Nacional de Cafeteros (FNC) hizo un llamado urgente a los caficultores a no descuidar la renovación de cafetales, práctica fundamental para mantener cultivos jóvenes, que a su vez se traduce en empresas más productivas, competitivas y rentables.

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Con apoyo del Servicio de Extensión, cifras recopiladas por la Gerencia Técnica de la FNC muestran que a la fecha el área de cafetales renovados ha disminuido 30% en comparación con el 25 de octubre de cada año.

“Hoy tenemos unas 130.000 hectáreas (ha) renovadas (edad menor o igual a 24 meses) del parque cafetero colombiano, cuando debíamos llevar cerca de 168.000 ha. Los caficultores deben tener claro que estas hectáreas son las que van a responder por parte de su producción en 2024 y otra parte más importante en las cosechas de los años 2025 y 2026”, expuso Hernando Duque, gerente técnico de la FNC.

Cuidados

El directivo recordó que las decisiones que los productores tomen hoy afectarán los próximos años, y que el envejecimiento y el aumento de la edad promedio de los cafetales implican retrocesos en productividad. Las cifras de la Gerencia Técnica reflejan que la edad promedio se acerca otra vez a siete años.

Duque invitó a los productores a aprovechar los buenos precios del café de este año para invertir en la renovación de cafetales, pues a mediano y largo plazo esta inversión se traducirá en fincas más productivas y rentables.

Aunque estos no son meses de renovación por los ciclos de producción, los caficultores pueden programarse desde ya para hacer sus renovaciones apenas termine la cosecha principal.

Los productores pueden recurrir al Servicio de Extensión para tener claro, en cada caso particular, cómo programarse y qué hacer para una adecuada renovación, pero también observar las épocas correctas en las cuales adelantar esta labor.

Según proyecciones, Brasil va a tener una cosecha media-alta en 2023 y alta en 2024, lo que podría traducirse en un ajuste de los precios internacionales; de modo que el llamado es a mantener un buen nivel de producción en Colombia.