El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió que los grandes superávit comerciales de Alemania y China más el gran déficit de Estados Unidos, podrían exacerbar las crecientes fricciones en el mundo.
En un mensaje que parece sobre todo dirigido al presidente norteamericano, Donald Trump, el FMI advierte una vez más sobre el uso de medidas proteccionistas para abordar cuestiones comerciales, ya que pueden dañar el crecimiento sin resolver el problema de fondo.
El estímulo fiscal decidido por Washington "está conduciendo a un endurecimiento de las condiciones monetarias, a un fortalecimiento del dólar y a un mayor déficit en la cuenta corriente de Estados Unidos", señaló la institución internacional.
Trump está llevando a cabo desde hace meses una ofensiva contra sus principales rivales comerciales, especialmente ante China, pero también contra Alemania y al conjunto de la Unión Europea, por supuestamente tratar injustamente a su país.
Los aranceles que impuso a las importaciones de acero y aluminio han provocado ira y rápidas represalias de parte de las naciones “agraviadas”.
En su último Informe del Sector Externo, el FMI instó nuevamente a los países con superávit, a tomar medidas para impulsar la demanda y reducir el ahorro para disminuir los excesivos desequilibrios que comprometen el comercio internacional.
El superávit de Alemania es "sustancialmente más fuerte" que el que justifica el estado de su economía, señala el Fondo, que también califica de "moderadamente más fuertes" respecto a sus economías, los superávit de China, Corea del Sur y la Unión Europea.
Esos países "deberían centrar sus esfuerzos en las reformas para reducir el exceso de ahorro a través de reformas en los sistemas de seguridad social y de pensiones", propone el informe.
El crédito
En el caso de Alemania, el FMI sostiene, como lo ha venido haciendo en años anteriores, que "impulsar la inversión pública también ayudaría a reducir los excesivos superávit".
Alemania registró un superávit del 8% del PIB el año pasado.
Sobre China, el Fondo Monetario Internacional advierte que la economía ha sido "excesivamente dependiente del crédito y la inversión, lo que podría culminar en una abrupta desaceleración del crecimiento y un consecuente resurgimiento de grandes excedentes externos".
Las naciones líderes en exportaciones no pueden seguir dependiendo de la demanda de los países deudores, especialmente Estados Unidos, apuntó el Fondo.
A corto plazo, en Estados Unidos podría "intensificarse el enfoque de su administración de reducir su déficit con medidas comerciales" si este último continúa creciendo desde el 2,4% del PIB registrado el año pasado, advierte el informe.
"Nuevas barreras comerciales y posibles acciones de represalia podrían descarrilar el crecimiento global con un impacto limitado en el exceso de desequilibrios globales", destaca el documento.
El informe señaló a su vez que permitir un aumento de la inmigración, algo a lo que Trump se opone firmemente, también podría ayudar a Estados Unidos.
El FMI aseguró la semana pasada que las crecientes restricciones comerciales eran "la mayor amenaza a corto plazo" para la economía mundial, y que en este panorama la economía estadounidense es "especialmente vulnerable".
En el peor de los casos, si se llegaran a implementar todas las amenazas arancelarias y las represalias, y las economías sufrieran un shock en la confianza, el PIB mundial podría caer 0,5% (430.000 millones de dólares) en 2020.