Una de las propuestas del actual Gobierno es la Economía Naranja, una idea que el presidente de la República, Iván Duque, ha impulsado para destacar a las industrias creativas y la cultura como un importante motor de desarrollo para el país.

De esta iniciativa surgió la integración con el denominado Turismo Naranja, con el cual se busca aprovechar la diversidad de razas, ancestral y de fiestas patronales con las que cuenta Colombia, para que sean experimentadas por los viajeros nacionales e internacionales que visitan las distintas regiones.

“El Turismo Naranja es una gran oportunidad para nuestra industria. Sin importar de dónde nos visiten, tenemos mucho que enseñarles de nosotros a los turistas. No se trata de solo recorrer los lugares más representativos de cada destino sino de vivirlo, sentirlo y de que conozcan sobre nuestra cultura y tradiciones”, afirmó Paula Cortés Calle, presidenta ejecutiva de Anato.

Planes

Es por ello que las Agencias de Viajes Asociadas al Gremio han incursionado en el diseño de planes que les permitan a los visitantes tener una conexión cercana con las comunidades para que sean ellas quienes les narren, muestren y enseñen aquellas actividades que tradición tras tradición han mantenido vivas. Dichos planes se encuentran en el portal Todoslosdestinos.com, una herramienta en la que las Agencias Anato dan a conocer toda su oferta nacional e internacional. 

Dentro de estos planes se encuentran, por ejemplo, las visitas a pueblos indígenas para compartir sus saberes y costumbres, aprender sobre sus labores diarias, artesanías y construcciones, así como también degustar junto a ellos la comida típica de la región; Otra alternativa es visitar talleres de filigrana para conocer sobre esta tradicional técnica realizada en Mompox desde las épocas de la Conquista y que hoy cuenta con gran reconocimiento nacional e internacional.

Asimismo, existe la posibilidad de preparar dulce de leche en el Valle de Cauca y Cauca; Vivencias con la comunidad de San Agustín y Tierradentro; visita a plazas de mercado donde el turista interactúa con los locales, entre otros.

Promociones
Cortés Calle dijo que “debemos promocionar y comercializar los destinos que tienen identidad cultural, artística y creativa de manera sostenible. Para lo cual, las Agencias de Viajes, como articuladores de los servicios turísticos, cada vez más buscan empaquetar experiencias que involucren al turista con la comunidad local. La Vitrina Turística de Anato 2019 será la oportunidad para que todos los empresarios de la industria turística conozcan más acerca del Turismo Naranja e implementen estrategias alrededor de este”.

Cabe destacar la importancia de realizar un trabajo articulado con el Gobierno con aquellos destinos de potencial turístico naranja para perfeccionar su oferta, encaminándolos al desarrollo de industrias creativas.

Las cifras

En 2018 un total de 4.388.815 visitantes extranjeros visitaron a Colombia, lo que significó un aumento del 10,4 % respecto al año anterior, si bien se trata de datos provisionales, informó el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo. Estas cifras se calcularon mediante la nueva metodología adoptada por el Ministerio, que excluye por primera vez la estimación de viajeros extranjeros por pasos fronterizos, con el fin de que el resultado no se vea alterado por la crisis migratoria venezolana. 

“El objetivo que se persigue con esto es tener una base mucho más creíble, precisa, sobre la situación, que es positiva. Los porcentajes de crecimiento demuestran el buen estado del turismo colombiano”, explicó por su parte el viceministro de Turismo, Juan Pablo Franky. 

Por nacionalidades, Estados Unidos aportó un total de 574.559 visitantes, seguido de Argentina, con 186.482; Brasil (181.033); México (167.209) y Ecuador (149.027), si bien tanto Brasil como Ecuador disminuyeron el número de viajeros respecto a 2017. 

Los responsables del Ministerio atribuyeron este descenso (del 5% en el caso brasileño y del 3% en el ecuatoriano) a la mala situación económica del primer país y a la crisis en la frontera entre Ecuador y Colombia como consecuencia de la llegada masiva de venezolanos.