*Plan tripartito Nación-Distrito-sector privado
* Revisar diagnóstico de Cámara de Comercio
El mayor o menor ritmo de la recuperación económica del país tras el fuerte coletazo de la pandemia dependerá, en una parte sustancial, de la mayor o menor velocidad con que Bogotá regrese a los niveles económicos que tenía al comienzo del año. Y no es para menos ya que la capital y la región que la circunda concentran alrededor del 30 por ciento del Producto Interno Bruto del país y una quinta parte de la población total. De igual manera, la zona tiene los más altos índices de competitividad empresarial y es el principal nicho de empleo a nivel nacional. También está al frente de las clasificaciones sobre dinamismo comercial, producción manufacturera, servicios financieros y de entretenimiento y ocio. A ello se suma que el aeropuerto El Dorado es el primero de América Latina en términos de movimiento de carga y el tercero en tráfico de pasajeros. El PIB de la ciudad-región, igualmente, está por encima de los 100 mil millones de dólares, superior al de varias naciones del subcontinente. En términos de PIB per cápita, el de Bogotá y los municipios de su área de influencia doblan y más al del resto del territorio…
Así las cosas, resulta de simple lógica que la estrategia de recuperación económica debe tener uno de sus énfasis en un plan muy bien estructurado para que esta ciudad-región vuelva a tener la pujanza de comienzos de año. No hay que olvidar que por lo general el PIB capitalino siempre ha estado por encima del promedio nacional, al tiempo que las calificaciones sobre solidez fiscal y potabilidad de la deuda también superan las de la Nación.
En el “Nuevo Compromiso por Colombia” que planteó el presidente Iván Duque, el pasado 20 de julio en la instalación del Congreso, como plataforma de la reactivación productiva pospandemia, que prevé movilizar más de 100 billones de pesos de capital público y privado, hay varios proyectos que tienen que ver directamente con la ciudad. Por ejemplo, en el listado de grandes obras se menciona la de la primera línea del Metro y el desarrollo vial de la ALO sur. A su turno, la Administración Distrital también está planteando su plan de recuperación, denominado “Plan Marshall”, que se compone de un proyecto de Acuerdo con incentivos socioeconómicos de corto, mediano y largo plazos, así como de la solicitud del cupo de endeudamiento más grande en la historia de la ciudad, por más de 10 billones de pesos.
La viabilidad de las distintas estrategias para recuperar la economía bogotana depende, en gran parte, de que se haga un diagnóstico objetivo y realista sobre el impacto de la pandemia en el tejido empresarial de la ciudad, la capacidad de consumo de los hogares y el universo de empleos. Sin una medición concreta de cada uno de esos flancos se corre el riesgo de que los recursos que se inviertan en los planes de reactivación se difuminen o no den los resultados esperados. Precisamente en esa dirección de aterrizar el diagnóstico para formular una estrategia de recuperación seria y estructural, resulta muy importante el estudio que realizó la Cámara de Comercio de Bogotá respecto al impacto de la crisis derivada de la pandemia y las recomendaciones de los empresarios para recuperar el potencial socioeconómico.
El diagnóstico es bastante preocupante: la dinámica empresarial se contrajo en todos los sectores entre enero y agosto, y el coletazo en las ventas, el empleo y la operación fue mayor en Bogotá frente al consolidado de otras regiones del país. Se encontró, igualmente, que en el trimestre mayo-julio en la urbe se perdieron 1.029.000 empleos y el número de ocupados bajó a 3,2 millones de personas.
Con base en ello los empresarios plantearon cinco propuestas de reactivación para la ciudad-región. Se propone eliminar las actuales restricciones de horarios para el funcionamiento del sector productivo, una mayor pedagogía ciudadana en materia de bioseguridad, la aceleración de 146 proyectos de movilidad e infraestructura, activar una Alianza Logística Regional, crear un grupo de élite de trabajo entre las cinco Curadurías Urbanas en Bogotá, unir recursos de los gobiernos Nacional y Distrital para ampliar la cobertura del Plan de Apoyo al Empleo Formal, promover la formalización y la sostenibilidad de las empresas así como un trabajo más eficiente en modernización tecnológica y reactivación bajo métodos de producción limpia, digitalización e incentivos tributarios diferenciales…
Lo importante ahora es que tanto los gobiernos Nacional como Distrital analicen estas propuestas y coordinen con los empresarios un plan tripartita de recuperación efectiva y sostenida. Solo así la ciudad-región más potente del país empezará a retomar su ritmo socioeconómico y jalonar al resto de Colombia.