Hora del Ministerio de la Mujer | El Nuevo Siglo
Jueves, 8 de Marzo de 2012

* Unidad Nacional podría moverse en tal sentido

* Un año del protagonismo femenino

 

Hoy, cuando se cumple el Día Internacional de la Mujer, muchas de ellas están en el ojo del huracán en Colombia. Y mucho más. Por ejemplo, es alarmante la racha de homicidios que se ha venido presentando en Antioquia sobre el género femenino. Igual es tremenda la nueva modalidad de echar ácido en los rostros de las mujeres por celos o cualquiera otra circunstancia, que busca desfigurarlas.

Indudablemente en los últimos tiempos la mujer ha venido fructificando en el escenario nacional. No se trata ya de ejemplos aislados, sino que participan naturalmente en todo tipo de actividades, destacándose en muchas de ellas. Precisamente han sido claves en tiempos recientes para resolver muchos entuertos.

Uno de ellos, de infausta recordación, fue la crisis bogotana que llevó al Alcalde y a jefes de entidades de control a la cárcel y a la destitución. El tema, que amenazaba con desbordarse, fue debidamente conjurado por Clara López Obregón, de quien todos los medios señalaron hace unos meses supo manejar con serenidad y tino las circunstancias. En efecto, la Ciudad no se desinstitucionalizó, pudo salir avante y presidió unas elecciones en sana paz.

De la misma manera, en días recientes a la primera Fiscal que tuvo el país, Viviane Morales, le fue anulada la elección por una contraposición de interpretaciones entre la Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado. Ha sido de las pocas personas que, sin necesitarlo, renunció a su cargo y permitió que prontamente se solucionara el desbarajuste. De inmediato la sucedió otra mujer, Martha Lucía Zamora, para hacer de encargada, con posesión formal ante el Presidente de la República, y cuya hoja de vida en todas las instancias de la Rama Judicial es demostrativa de un esfuerzo brillante y acorde con el temple que se requiere para ser Juez en Colombia. Sobre el tema, incluso, este periódico ha sugerido que la terna a presentar para superar definitivamente el escollo sea femenina, en acicate y demostración de continuar la línea iniciada por Morales, que sin duda generó un punto de inflexión en la aplicación de la Ley.

En cuanto a los órganos de control es evidente que Sandra Morelli, la primera Contralora que ha tenido el país, ha sabido también dejar una impronta y, pese a que se le ha querido buscar quiebres similares a los de Morales, es claro que ha sido capaz de sacudir a la Contraloría de la modorra en que venía. Y es evidente, asimismo, que son Procuradoras Delegadas las manos derechas del procurador Alejandro Ordóñez, de calificación sobresaliente por parte de todos los sectores políticos.

Tampoco hay duda de que la Consejería Presidencial para la Mujer ha venido siendo más eficaz y moderna con Cristina Plazas. Vale recordar que desde la campaña presidencial de Noemí Sanín se propuso la creación del Ministerio de la Mujer precisamente para lograr una mayor relevancia. No sobraría, al respecto, que el presidente Santos retomara la idea como parte del proyecto de Unidad Nacional, tanto en cuanto la discriminación sigue siendo un fenómeno que se presenta en todos los estratos. La violencia intrafamiliar es cada vez más un fenómeno que exige atención inmediata y dedicación exclusiva, puesto que en ello no solo sufren los hijos, sino ciertamente muchas mujeres. El Ministerio serviría para enfrentar determinantemente el problema con campañas pedagógicas y sanciones efectivas, recuperando la familia como nutriente social.

Las relaciones internacionales del país están en manos de la canciller María Ángela Holguín y la Secretaría General de la Unasur en las de María Emma Mejía. Hay consenso en su labor destacada. Al mismo tiempo, en el interior, otras mujeres, como Carmen Palencia, sobresalen en el proceso de restitución de tierras e indemnización a las víctimas, lo mismo que Marleny Orjuela ha sabido mantener viva la llama para la liberación de los suboficiales secuestrados, aún en poder de las Farc. Infortunadamente, algunas, como María del Pilar Hurtado, han desdicho de la entereza que otras han venido demostrando. La misma Yidis Medina, que fue capaz de develar todo el entuerto de la compraventa de la reelección presidencial inmediata, supo decir la verdad y ahora la Fiscalía actúa en consonancia.

Lo que más se necesita, sin embargo, es trabajar por la mujer anónima. Es allí precisamente donde cabría un Ministerio para la Mujer, que se reitera como propuesta.