Irrumpe el anarcoterrorismo | El Nuevo Siglo
Miércoles, 1 de Abril de 2015

Los profetas de la evolución social de los pueblos y los futurólogos, después de la caída del Muro de Berlín, del fin de la guerra fría, coincidían en afirmar que las revoluciones no tenían futuro al enfrentar un aparato del Estado eficaz, que tendía a anticiparse a sus movimientos.

El comandante Fidel Castro, en la segunda posesión como presidente de Carlos Andrés Pérez, proclamó que en nuestra región ya no había espacio para llegar al poder por medio de milicias revolucionarias. Por lo que aconsejaba a la extrema izquierda abandonar la lucha armada y buscar el poder por elecciones. Se trataba de una reflexión similar a la que dejaba la experiencia rusa. Algo así como lo ocurrido con la técnica del golpe de Estado ideada por Trotsky, para la toma del poder al asaltar los centros vitales del Gobierno en Moscú y hacer la revolución, sin esperar los resultados de una larga guerra en un país tan extenso. Lo que no pudo repetir a la muerte de Lenin, puesto que Stalin, previendo el intento de golpe de Estado se anticipó a copar esas instalaciones, reduciendo a prisión a los seguidores del erudito políglota y eventual heredero de Lenin, quien murió asesinado en México.

Pues resulta que el Estado Islámico y los movimientos insurgentes afines apuestan a incendiar sus zonas de influencia, sin afincarse por ahora en un área en especial, lo que les da a sus empresas un cierto carácter itinerante, quizá con la idea de evitar la concentración que atraería los misiles de las grandes potencias.

En otro sentido actúan los grupos anarquistas españoles, que coinciden en la táctica en cierta forma con los del EI, al apelar al terrorismo. Un fuerte resurgir del sector anarquista de la ETA, confirma como los movimientos terroristas y revolucionarios mutan a conveniencia. La diferencia con los primigenios terroristas de la ETA obedece a que los anarcoterroristas de nuevo cuño financian sus fuerzas mediante eventos pacíficos, conciertos, bazares y fiestas populares. Según las fuerzas policiales españolas: los anarquistas “han incrementado notablemente sus recursos financieros y por tanto la posibilidad de realizar acciones terroristas de mayor peligrosidad y envergadura.