El expresidente Álvaro Uribe ha cuestionado en diversas ocasiones los resultados de la jornada electoral del pasado 13 de marzo.
Ayer, Uribe insinuó que no es posible que los nuevos legisladores electos se posesionen en medio de las denuncias que se han hecho sobre irregularidades en las elecciones.
"¿Cómo se va a posesionar el nuevo Congreso con la acusación seria de fraude? Con: miles denuncias de votantes, cuyos votos no aparecieron; denuncias sobre jurados; discrepancia mayor en conteos y reportes. No está clara la legitimidad del nuevo Congreso”, indicó.
Adicionalmente, el expresidente Uribe se mostró preocupado por los comicios presidenciales que se realizarán en medio de las anomalías denunciadas en las pasadas votaciones.
"¿Cómo se va a llevar a cabo la elección presidencial sin resolver a fondo el problema en la elección del Congreso? Tema de Estado que destruye la democracia”, sostuvo.
En anteriores ocasiones había dicho que “estas elecciones dejan toda la desconfianza. E 14 llenos de tachones, enmendaduras, firmas que no coinciden. A las inconsistencias se suma la abrumadora votación del petrismo en zonas de narcotráfico. No se puede aceptar este resultado”.
Por otro lado, el senador Iván Cepeda le dijo a EL NUEVO SIGLO que “cuando al expresidente sus deseos no se materializan, él emprende campañas para intentar deslegitimar las instituciones, pero eso no tiene ningún sustento”.
“El 13 de marzo votaron millones de ciudadanos en el país, hubo unos escrutinios hechos por la autoridad electoral, ha habido unas irregularidades, por supuesto, como en todas las elecciones que se han presentado en este país. Colombia tiene un sistema electoral supremamente anacrónico y que tiene expresiones de corrupción, pero eso de ninguna manera invalida las elecciones. Lo que puede haber son reclamos ante las autoridades, reclamos que están perfectamente reglamentados en la ley y que se pueden cursar por las vías existentes”, afirmó.
“En una reunión de la Comisión Nacional de Garantías Electorales en la cual se tomó una decisión por voluntad mayoritaria de los partidos, en la que no habrá un reconteo general y lo que hay es que resolver esas reclamaciones y obviamente otorgar como deberá hacerse las credenciales a los congresistas elegidos”, agregó.
“Hacer lo que dice Uribe sería un golpe de Estado sin ninguna clase de fundamento legal ni jurídico. Lo que Uribe está expresando es una opinión respetable, es un dirigente político, pero es una opinión. No hay ningún precedente ni legal ni jurídico que pueda apuntar a que las elecciones del 13 de marzo han sido declaradas inválidas. Uribe es un ciudadano común y corriente; bienvenidas sus opiniones, controvertidas pueden ser, pero por eso no crean ninguna jurisprudencia, ni ninguna decisión política”, expresó Cepeda.