No hay actividad económica libre de extorsión de manera permanente: Lafaurie | El Nuevo Siglo
JOSÉ FÉLIX Lafaurie, presidente de Fedegán, aseguró que con frentes solidarios tratan de hacer una labor de protección a través de dinámicas solidarias con las autoridades. /Foto - X (@jflafaurie)
Miércoles, 28 de Febrero de 2024
Redacción Política

EL NUEVO SIGLO: En medio de tantas malas interpretaciones, algunas de ellas muy graves, ¿en qué consisten realmente los Frentes Solidarios de Seguridad y Paz?

JOSÉ FÉLIX LAFAURIE: Los Frentes Solidarios de Seguridad y Paz son una herramienta que la policía viene implementando desde el año 1995. Hay más de 33.000 fuentes de seguridad en el país, hay más de 4.000 empresariales, pero, al mismo tiempo, Fedegán firmó en 2006 un acuerdo de cooperación con la Policía Nacional, cuyo principal compromiso era la constitución del Frente de Seguridad Rural.

Es decir, esto ha sido una política reiterada de la Policía. Yo no entiendo dónde están las interpretaciones graves que eventualmente hay sobre un tema tan sencillo como este.

ENS: ¿Cómo garantizar que esta iniciativa no se desfigure y termine dando lugar a un presunto factor de violencia?

JFL: Esto no tiene por qué degradar o generar situaciones de orden público; por el contrario, se trata de que la gente que habita un territorio pueda construir un tejido social de protección entre ganaderos, comerciantes y cafeteros, pero con la autoridad: con el alcalde, con el personero, con el juez, con la policía, con el soldado.

El principal objetivo es que le quitemos los territorios a los bandidos. El territorio no puede seguir siendo un escenario de violencia. Mientras que los ciudadanos respetuosos de la ley intentan construir un país, terminan sometidos a las dinámicas de violencia.

Iniciativa

ENS: ¿Qué otros gremios de la Agroindustria han manifestado interés por esta iniciativa?

JFL: Yo respondo por el gremio ganadero, que es un gremio diseminado por todo Colombia. El país tiene 1.122 municipios, en los cuales 1.105 hay ganadería. Es decir, que a duras penas en 17 no hay ganadería.

Por consiguiente, tratar de tener respuestas frente a las dinámicas de inseguridad y violencia es mi obligación.

Claro, no se trata de que alguien sustituya a la autoridad, de lo que se trata es de acompañar a la autoridad, a quienes tienen responsabilidades constitucionales para proteger la vida y, al mismo tiempo, garantizar los derechos humanos.

ENS: ¿Cómo entender que desde sectores de izquierda se critique una iniciativa que propende por la colaboración entre la ciudadanía y la Fuerza Pública para combatir el delito?

JFL: Son resentidos. Mientras que no he escuchado ningún tipo de crítica frente a las demostraciones de fuerza, por ejemplo, de la Guardia Indígena o de la Guardia Campesina, que degolló a un policía de Esmad y secuestró durante par de horas a 67 de ellos. No ha habido ningún tipo de preocupación de esos sectores.

En cambio, cuando, por el contrario, se trata de hacer una labor de protección a través de dinámicas solidarias con las autoridades, más de uno hace cuestionamientos que no vienen al caso.

El rechazo

ENS: El presidente Gustavo Petro ha rechazado la propuesta de brigada de seguridad, indicando que el abandono del territorio no se puede frenar con cuerpos de ese estilo, ¿usted qué piensa?

JFL: El presidente Gustavo Petro no ha sido lo suficientemente explícito sobre el tema. Aún más, cuando se revisan las declaraciones se deja abierta la colaboración de la sociedad con las autoridades.

Hablaré con él, el lunes a las 10:00 de la mañana y le explicaré en detalle de qué se tratan estos Frentes Solidarios de Seguridad y Paz.

ENS: ¿En qué zonas del país podría empezar a implementarse?

JFL: Ya se está implementando, empezamos con un programa piloto en el Cesar. Se están constituyendo, por el momento, siete frentes. Y vamos a tratar de derivar de allí experiencias para luego extrapolarlas o llevarlas a otras partes del territorio.

ENS: Quienes apoyan esta iniciativa, han propuesto, incluso que se pueda convertir en un proyecto de ley, ¿usted qué piensa?

JFL: No es necesario un proyecto de ley por dos razones. Primero, porque está claramente reglado en normas sobre las cuales ha venido actuando la policía desde el año 1995.

Segundo, porque hay una obligación constitucional de los ciudadanos de colaborar con las autoridades.

Se trata de hacerlo y hacerlo bien, de manera que las autoridades estén al frente de la iniciativa para que no exista un solo desbordamiento, como no ha habido un solo desbordamiento con las brigadas solidarias para evitar las invasiones de fincas.

Inseguridad

ENS: ¿Qué tan grave es hoy la situación de inseguridad y desorden público en el país?

JFL: Muy grave. Hoy más de 428 municipios están bajo el control territorial de un grupo armado ilegal para proteger rentas ilícitas, llámese coca, llámese marihuana, llámese amapola, llámese minería ilegal.

En consecuencia, esos actores y, por supuesto, sus redes comerciales, que son más de 800 grupos criminales que venden estupefacientes en ciudades pequeñas, medianas y grandes, pues terminan generando unas dinámicas de violencia e inseguridad muy altas.

No hay zona del país que no esté hoy en día amenazada por un grupo criminal. Pero, peor aún, hoy no hay actividad económica que no sea extorsionada de manera permanente.