En apenas unas semanas Hansi Flick ha logrado cambiar la cara a un Barcelona que cerró la temporada pasada sin títulos y con problemas financieros que le impedían fichar para firmar un espectacular inicio de LaLiga... aunque ahora será la Champions, en la que hoy visita al Mónaco, la que mida el valor real de los azulgrana.
Cinco victorias en otras tantas jornadas ligueras, 17 goles a favor y solo cuatro en contra son los datos espectaculares del nuevo Barça construido por el exseleccionador alemán y antiguo técnico del Bayern Múnich.
Más sorprendente aún, el técnico germano lo ha conseguido con apenas un fichaje (Dani Olmo) y pese a numerosas bajas por lesión (Gavi, Fermín López, De Jong, Araujo, Christensen), lo que le obligó a tirar de la inagotable cantera de La Masía... con excelentes resultados por el momento.
Marc Casadó, Héctor Fort, Sergi Domínguez, Gerard Martín y Pau Víctor han contado con más minutos de juego de los que hubiesen disfrutado en condiciones normales, sin olvidar que dos adolescentes como Pau Cubarsí y Lamine Yamal (17 años) son fijos en el once titular (el segundo incluso con vitola de estrella) y que Marc Bernal (también 17 años) ha sufrido una grave lesión cuando se estaba asentando en el primer equipo.
El trabajo de Flick no solo se está viendo con los recién llegados. Jugadores como Robert Lewandowski, Pedri, Raphinha y Jules Koundé están dando un rendimiento muy superior al ofrecido en la temporada pasada.
El equipo ha recuperado en este inicio de temporada elementos del llamado ‘ADN Barça’ como la presión asfixiante para recuperar el balón, mayor nivel físico y la ambición para seguir buscando el gol con el marcador a favor... elementos que se echaron a faltar en el equipo entrenado por Xavi Hernández la pasada temporada.
Una de las incógnitas es si el equipo podrá mantener el nivel a medida que avance la temporada y sobre todo ahora que comienza la Liga de Campeones y se encadenen los partidos: el Barcelona jugará siete partidos en el próximo mes, más otros dos del parón de selecciones de octubre.
La recuperación progresiva de los lesionados debería dar a Flick más variantes y posibilidades de rotar para mantener el nivel de juego.
Otro de los aspectos en los que destaca el equipo de Flick es la capacidad para generar ocasiones y la eficacia ante el arco contrario de todos los delanteros: Lewandowski ha marcado cuatro goles; Raphinha, Yamal y Olmo suman tres cada uno, aunque este último estará el próximo mes de baja por lesión.
Curiosamente, el debut del Barça en Champions será ante el Mónaco, el único equipo que ha ganado al club azulgrana esta temporada, con un contundente 3-0, aunque fue en un amistoso, el Trofeo Joan Gamper, hace poco más de un mes.
El equipo francés demostró entonces que con transiciones rápidas se puede hacer daño al Barcelona, aunque como ha reconocido en la previa su entrenador, el austriaco Adi Hütter, hoy tendrá enfrente un rival diferente.
En este inicio de temporada, el club monegasco se ha mostrado muy fuerte en defensa (un solo gol encajado) y variado arsenal ofensivo, con seis goleadores diferentes y con el mediocentro suizo Denis Zakaria como único jugador que ha anotado más de una vez.
Asimismo, con Julián Álvarez como nueva bandera y sin nada que envidiar a las grandes escuderías del continente, un Atlético Madrid crecido y ambicioso arranca en la nueva Liga de Campeones en su cancha ante un hueso duro de roer como el Leipzig.
Los rojiblancos se dieron un baño de confianza el sábado, también en el Metropolitano, ante el Valencia (4-1) con los primeros goles de la ‘Araña’ Álvarez y el inglés Conor Gallagher.
El cuarteto de fichajes de alto nivel lo completaron el campeón de Europa con España Robin Le Normand y el delantero noruego Alexander Sorloth, 23 goles con el Villarreal el pasado curso.
Se unen a un efectivo muy consolidado, liderado una vez más por el arquero Jan Oblak, el capitán Koke, el campeón del mundo argentino Rodrigo de Paul y Antoine Griezmann, la pieza clave del entramado de Diego Simeone.
Por el momento, un notable rendimiento en la Liga, con 11 de 15 puntos conseguidos y solo dos goles concedidos.
El técnico argentino afronta un nuevo asalto a la Champions, la competición que falta en la vitrina atlética, tras quedarse a las puertas en las dos finales perdidas ante el Real Madrid, 2014 y 2016, ya con Simeone en el banquillo, que se unen a la de 1974 contra el Bayern Múnich.
Los rojiblancos, convertidos en un clásico de la competición -12ª participación consecutiva-, chocan ante un Leipzig también establecido a pesar de su reciente historia, con su sexta presencia seguida, incluida una semifinal en 2020.
Entre sus amenazas el esloveno Benjamin Sesko, el neerlandés Xavi Simons o el goleador belga Lois Openda.
Dirigido por Marco Rose, suma en tres jornadas de Bundesliga dos victorias y un empate, el sábado ante el Unión Berlín (0-0). Su gran momento, el triunfo 3-2 en la cancha del Leverkusen en la segunda jornada, remontando dos goles para poner fin a la racha de 35 partidos seguidos sin derrota del vigente campeón alemán.