La provincia de Adén, en el sur de Yemen, ha sido "liberada" después de cuatro meses de combates, afirmó el primer ministro yemení exiliado en Riad, Jaled Bahah, en su página Facebook.
"El gobierno anuncia la liberación de la provincia de Adén en este primer día de Eid al Fitr", escribió, refiriéndose a la fiesta musulmana que marca el final del mes de ayuno del Ramadán.
"Vamos a trabajar para restaurar la vida en Adén y en todas las ciudades liberadas, y para restablecer el agua y la electricidad", dijo.
Las fuerzas gubernamentales lanzaron una ofensiva en la ciudad de Adén, la primera desde la entrada a finales de marzo de los rebeldes chiitas hutíes en la ciudad que obligó al presidente Abd Rabbo Mansur Hadi y al gobierno a huir a Arabia Saudita.
La contraofensiva para recuperar Adén corrió a cargo de la coalición antirebeldes "Resistencia popular" que contó con refuerzos entrenados y armados por Riad.
Arabia Saudita, limítrofe con Yemen, se puso al frente el 26 de marzo de una coalición árabe con el objetivo de impedir que los rebeldes tomasen el control de todo el país y, de paso, limitar la influencia de Irán en la región.
Los hutíes lanzaron una ofensiva en julio de 2014 en su bastión de Saada (norte) y con la ayuda de soldados fieles al expresidente Ali Abdalá Saleh consiguieron apoderarse de buena parte del territorio, incluida la capital, Saná, y Adén.
El conflicto causó más de 3.200 muertos, la mitad de ellos civiles, desde marzo, según la ONU.
Alrededor del 80% de la población -es decir 21 millones de personas- necesita ayuda o protección en este país pobre de la península arábiga y más de diez millones tienen dificultades para alimentarse o encontrar agua, añade.
Gran parte de Adén quedó destruida por cuatro meses de combates y de ataques de la coalición árabe. Esta situación llevó a la ONU a anunciar una tregua humanitaria la semana pasada que nunca se cumplió.