Anastacio Tzib Caal, dirigente sindical guatemalteco, ha sido asesinado en el país centroamericano, ha denunciado este lunes la Red de Defensores de Derechos Laborales de Guatemala (REDLG), que ha afirmado que este hecho "representa un ataque directo y cobarde contra el movimiento sindical".
"Es con profundo dolor y consternación que REDLG condena enérgicamente el brutal asesinato de Tzib Caal, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Empresa SAE-A Texpia II (SITRATEXPIA II)", según reza un comunicado en el que el organismo agrega que falleció el 15 de junio.
REDLG ha trasladado su "más profunda solidaridad" a sus seres queridos, así como a "todos los miembros" de la compañía. "Su pérdida no solo afecta a sus seres queridos, sino también a todos los trabajadores que defienden día a día sus derechos en condiciones adversas", ha advertido.
Asimismo, ha demandado una investigación "exhaustiva, imparcial y rápida" por parte de la Fiscalía, exigiendo que se identifique y procese a los responsables materiales e intelectuales de su muerte. También ha hecho un llamamiento "urgente" a la comunidad nacional e internacional para que "se solidaricen con la familia y el sindicato".
Por último, ha solicitado a "las autoridades correspondientes y a la empresa que garanticen la seguridad y protección de todos los miembros del sindicato, especialmente de sus directivos": "Es crucial que se implementen medidas de protección adecuadas para prevenir futuros ataques y asegurar que los derechos de los trabajadores sean respetados y defendidos", ha concluido.
LAS AUTORIDADES GUATEMALTECAS INSTAN A QUE "NO QUEDE IMPUNE"
El Gobierno guatemalteco, que ha expresado sus condolencias a la familia y dirigentes sindicales a través del Ministerio de Trabajo y Previsión Social, ha reiterado que "la libertad sindical es una garantía primordial para la paz y la justicia social".
La cartera ministerial se ha solidarizado "con los actores sociales que se unen en al exigencia de justicia y defensa de los derechos fundamentales de los trabajadores", mientras que ha demandado una investigación para que "este hecho no quede impune".
"Por mandato constitucional, el Ministerio Público deberá realizar las investigaciones de manera objetiva, exhaustiva y transparente, con el objetivo de esclarecer plenamente los hechos y las circunstancias en las que se produjo el lamentable acontecimiento", ha incidido.
Con todo, las autoridades han sostenido que "es imperativo que estas investigaciones determinen las responsabilidades y se sancione a los culpable", ya que "solo a través de una justicia pronta y efectiva podemos prevenir la repetición de estos actos de violencia y garantizar un entorno seguro para todas y todos los defensores de los Derechos Humanos y sindicales".
EEUU: "LOS ACTIVISTAS SINDICALES NUNCA DEBERÍAN TEMER POR SUS VIDAS"
Washington, por su parte, ha condenado el asesinato de Tzib Caal y ha manifestado que apoya "los esfuerzos" de las autoridades guatemaltecas para "responsabilizar a los perpetradores y garantizar que los trabajadores puedan ejercer sus derechos de manera segura".
"Los derechos de los trabajadores son una parte fundamental de una democracia que funcione. Los activistas sindicales nunca deberían tener que temer por sus vidas", ha declarado el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller, en un comunicado.
Tras extender sus condolencias a los seres queridos y compañeros del líder sindical, ha hecho hincapié en que "los ataques a sindicalistas guatemaltecos limitan las perspectivas de desarrollo económico" del país y "socavan los Derechos Humanos en sus cadenas de suministro globales".
"Estados Unidos sigue comprometido a apoyar los derechos de los trabajadores en Guatemala a través de nuestros programas y el compromiso con las autoridades guatemaltecas. Además de los derechos de los trabajadores, Estados Unidos apoya los esfuerzos de seguridad de manera más amplia, que permitan a todos vivir sin temor a la violencia", ha concluido.