El ex primer ministro conservador Alexander Stubb ganó este domingo las elecciones presidenciales de Finlandia con el 51,6% de los votos, en unos comicios marcados por las tensiones con Rusia desde la adhesión del país a la OTAN.
"Es bastante increíble que un país del tamaño de Finlandia pueda celebrar unas elecciones tan justas y honestas en este contexto de política de seguridad", celebró ante sus partidarios Stubb, de 55 años, después haber ido a saludar a su rival Pekka Haavisto a su fiesta electoral.
El resultado final le dio el 51,6% de los votos, frente al 48,4% de Haavisto, miembro de los Verdes que se presentó como independiente. En esta segunda vuelta votaron el 70,7% de los cerca de 4,3 millones de electores.
El jefe de Estado, con menos poderes que el primer ministro, es elegido por un periodo de seis años y dirige la política exterior del país en estrecha colaboración con el gobierno. También es comandante supremo de las Fuerzas Armadas.
El nuevo presidente tomará posesión de su cargo el 1 de marzo.
Su papel ha ganado importancia desde la guerra en Ucrania y la entrada a la OTAN de Finlandia, a la que este país prometió responder con "contramedidas".
Fue justamente la solicitud de adhesión a la Alianza Atlántica lo que motivó a Stubb, ministro de Relaciones Exteriores a sus 40 años y primer ministro entre 2014 y 2015, a regresar a la política finlandesa tras retirarse de los asuntos públicos.
"Hay guerra en Europa y en Gaza. Es importante que el presidente de Finlandia mantenga la cabeza fría e intente mantener la paz aquí y trabajar por la paz en otros lugares", declaró Stubb en la televisión pública Yle.
Finlandia, que comparte 1.340 km de fronteras con Rusia, se mantuvo neutral durante la Guerra Fría y ha sido un fiel defensor del diálogo entre los países occidentales y Rusia.
Pero tras la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022, este país del norte de Europa puso fin a tres décadas de no alineamiento militar.
En agosto, Finlandia acusó a Moscú de orquestar una crisis migratoria en sus fronteras. Como consecuencia, decidió cerrar su frontera con Rusia en noviembre, una medida respaldada por ambos candidatos.
"La situación política internacional es muy complicada para nosotros en este momento, pienso que realmente necesitamos un presidente que pueda trabajar con los distintos partidos políticos y que pueda negociar", explicó a la AFP una votante, Maarit Tarkiainen, médico de 46 años.
Alexander Stubb, que siempre se mostró partidario de la adhesión de su país a la OTAN, está a favor de intensificar las sanciones contra Rusia.
"El fuerte apoyo a Ucrania continuará sin duda alguna. Y Rusia aparecerá en la agenda de un modo u otro, además de por la guerra", declaró a la AFP Hanna Ojanen, directora de investigación política de la Universidad de Tampere.
La diferencia entre los dos candidatos se encontraba principalmente en el tema del almacenamiento y transporte de armas nucleares en Finlandia.
Stubb considera que el país no debe excluir "ninguna parte" de la política de disuasión nuclear de la alianza.
En 2022, el presidente saliente, Sauli Niinistö, elegido en 2012 y considerado el dirigente europeo en activo que más hablaba con Vladimir Putin, le comunicó directamente su decisión de entrar en la OTAN.
"Quiero que (el próximo presidente) sea igual de bueno como su predecesor", afirmó Joakim Björnström, de 36 años y residente en la capital, Helsinki.
Para Hanna Ojanen, la experiencia internacional de Stubb, que también fue eurodiputado, es una ventaja.
"En muchos sentidos, tendrá experiencia y será competente, y creo que podrá gestionar tanto la cooperación multilateral como las relaciones bilaterales, lo cual es necesario, y probablemente también comprenderá el panorama general de la política exterior y de seguridad", afirmó.
Por su parte, Theodora Helimaki, investigadora en ciencias políticas de la Universidad de Helsinki, cree que su personalidad extrovertida y su lista de contactos podrían llevarlo a ser "un presidente de una clase ligeramente nueva".