John Lennon, entre la genialidad y la rebeldía | El Nuevo Siglo
AQUEL 8 de diciembre de 1980, poco antes de las once de la noche, Lennon y su esposa Yoko Ono volvían a su casa tras una sesión de grabación, cuando un hombre surge ante el edificio y dispara cinco veces contra el músico.
/AFP
Lunes, 7 de Diciembre de 2020
Redacción internacional

La vida de John Lennon se acabó brutalmente hace 40 años en Nueva York, pero su leyenda sigue viva, su música se continúa escuchando en todo el mundo y su figura es aún una fuente de inspiración para otros artistas.



Tal vez uno de los mayores tributos a Lennon vino de la mano de Bob Dylan, que en su álbum "Tempest" (2012) recuerda al músico asesinado en Nueva York, el 8 de diciembre de 1980 por un fan desequilibrado. Uno de los temas del disco, titulado "Roll on John", era un tributo de siete minutos a Lennon y a su recorrido musical.

Desde entonces, los homenajes son incontables y a menudo vienen de artistas poco cercanos musicalmente a él.

Por ejemplo, Ozzy Osbourne, líder de Black Sabbath, grupo pilar del heavy metal, que hizo una versión muy personal de "¿How?", incluida en el álbum "Imagine" de Lennon. En el videoclip, el artista, vestido con un largo abrigo de cuero negro, cruza las calles de Nueva York para llevar un ramo de flores ante la placa conmemorativa de Lennon, en Central Park.

También en el mundo musical hay dos escuelas: quienes se niegan a entrar en el juego de la supuesta rivalidad Lennon y Paul McCartney, y quienes sí.

Lo cierto es que cuarenta años después de la muerte de Lennon, McCartney y Ringo Starr, los supervivientes de los Beatles, siguen haciendo música, cada uno por su cuenta y a su manera, aunque es claro que el primero sigue hoy como ícono de la música de las últimas décadas. Es más, a los 78 años, publicará el próximo 18 de diciembre su nuevo álbum.

"Es una tontería. John y Paul formaron parte del mejor grupo del mundo, que cambió el rostro de la música e inspira hasta hoy por sus armonías", dice Sharleen Spiteri, líder del grupo Texas.

Cuestionado

Más allá de la música, Lennon fue también una figura contradictoria y que no genera unanimidad. Muchos cuestionan hoy su imagen de ícono inconformista y la sinceridad de sus posturas sobre la igualdad de géneros o el capitalismo.



Como ha ocurrido con figuras como Ernesto Che Guevara, la imagen de Lennon, con sus frases más emblemáticas y sus gafas redondas se multiplica en camisetas que lucen personas en el mundo entero.

"John ha pasado a la historia como el provocador de la banda, por ejemplo con el terrible escándalo de la época, cuando dijo que los Beatles eran más conocidos que Cristo. Pero no se politizó y solo comenzó a visitar galerías de arte con Yoko Ono. Al principio, el más apegado a la cultura, el que recorría las exposiciones, era Paul", recuerda Stan Cuesta, autor de "The Beatles".

"En Lennon hay un lado 'teddy boy' (movimiento cultural juvenil surgido en Londres en los años 1950, con una estética asociada al rock y a la insatisfacción social), es alguien que también tuvo un Rolls en un momento. Es alguien muy complejo", asegura Cuesta.

Eric Burdon, exlíder de Animals cuenta, por ejemplo, en el documental "Rock'n'roll animal" que la canción "I am the walrus" de los Beatles, nació de una "orgía sexual" en la que ambos participaron en Londres.

Pero volviendo a la música, Stan Cuesta insiste en que Lennon era un "genio natural de la música, el más intuitivo de los Beatles y el único capaz de componer un clásico como 'Strawberry fields forever'".

El fatídico día

Aquel 8 de diciembre de 1980, poco antes de las once de la noche, Lennon y su esposa Yoko Ono volvían a su casa tras una sesión de grabación, cuando un hombre surge ante el edificio y dispara cinco veces contra el músico.



Gravemente herido, Lennon es llevado urgentemente a un hospital en el asiento trasero de un coche de policía. Pero había perdido demasiada sangre y "no tenía la menor posibilidad de sobrevivir", explicó un médico sobre el trágico asesinato de un artista cuya popularidad era planetaria.

El asesino, detenido en el lugar del crimen, se llama Mark Chapman, tenía 25 años y dijo no haber podido resistir a las "voces" que lo impulsaron a matar a Lennon.

Horas antes de pasar al acto, Chapman se había sumado a otros fans frente al domicilio del cantante, que le garabateó un autógrafo en un ejemplar de "Double Fantasy", su nuevo disco.

A los 40 años, el músico británico volvía al primer plano tras varios años de silencio. Pero nadie lo había olvidado, incluso 10 años después del final de los Beatles

Pese a esos años de silencio, Lennon -que escandalizó años antes al comparar la popularidad de los Beatles con la de Jesús- recibió homenajes multitudinarios. El 14 de diciembre, entre 100.000 y 200.000 personas desafiaron el frío en Central Park, a dos pasos del escenario del crimen, para rendirle tributo.

"Hay que remontarse a la trágica muerte de John Kennedy o del pastor Martin Luther King en los años 1960 para encontrar semejante conmoción por la muerte de una personalidad", aseguró la AFP aquel día.

En el Reino Unido, el impacto fue enorme. En Liverpool, ciudad natal del músico pacifista, "unas 20.000 personas cantaron a coro 'Give Peace a Chance'", al final de un concierto organizado en su honor ese 14 de diciembre.



Como en las épocas de la Beatlemanía, los fans lloraban y se desmayaban. "John Lennon no ha muerto. Mientras viva su música, él no morirá", advertía el antiguo empresario del grupo, ante la enlutada muchedumbre.

Los homenajes llegaron hasta Moscú, donde la policía tuvo que intervenir para dispersar a centenares de jóvenes congregados cerca de la universidad, portando retratos de Lennon. La Unión Soviética no había quedado el margen del fenómeno de los Beatles, el grupo pop del siglo, cuyas grabaciones importadas se vendían en el mercado negro.

Culto y subastas

Décadas después de su muerte, aún se venden a elevados precios en las subastas algunas de las reliquias de John Lennon.

El piano en el que compuso "Imagine", la canción más famosa del siglo pasado, fue vendido en 2000 en Londres por 2,45 millones de euros (2,95 millones de dólares) y una de sus guitarras por más de 2 millones de dólares (1,66 millones de euros) en Estados Unidos en 2015.

No hay que olvidar que en 2017 "Imagine", la icónica oda a la paz mundial de 1971 fue declarada "canción del siglo", en una gala de la National Music Publishers Association.

Algunos nostálgicos tampoco dudaron en pagar 137.500 libras (152.000 euros, 182.000 dólares) por un par de sus famosos anteojos de sol redondos, e incluso 35.000 dólares en Texas en 2016 por un mechón de su cabello.