El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, urgió el martes a la comunidad internacional a respaldar el combate contra el movimiento islamista palestino Hamás, que el 7 de octubre llevó a cabo una letal ofensiva desde Gaza contra el Estado hebreo.
"De la misma forma en que el mundo se unió paa vencer a los nazis (...), el mundo debe unirse a Israel para vencer a Hamás", declaró Netanyahu en una conferencia de prensa en Tel Aviv junto al jefe de gobierno alemán, Olaf Scholz.
Mientras tanto las tropas israelíes abatieron el martes a cuatro milicianos que intentaban entrar en su territorio desde Líbano, informó el ejército en un momento de gran tensión en la frontera entre ambos países.
Israel intercambia disparos con Hezbolá y militantes palestinos aliados en Líbano casi a diario desde el 8 de octubre, el día después de que Hamás, aliado palestino de Hezbolá, lanzara un ataque masivo contra Israel en el que murieron más de 1.400 personas, la mayoría civiles.
El ejército israelí, cuyos ataques de represalia contra Hamás en la Franja de Gaza han matado a más de 3.000 personas, en su mayoría civiles, dijo que sus fuerzas abrieron fuego el martes contra militantes que habían intentado cruzar la frontera norte con Líbano por la mañana.
"Las tropas de observación detectaron un escuadrón terrorista que intentaba infiltrarse en la valla de seguridad con Líbano y colocar un artefacto explosivo", indicó el ejército en un comunicado, añadiendo que "cuatro terroristas fueron abatidos".
Más tarde, misiles antitanque apuntaron a las fuerzas israelíes en dos lugares, y los tanques y la artillería israelíes tomaron represalias contra los "orígenes del fuego" y los puestos militares de Hezbolá, precisó la misma fuente.
Los disparos "efectuados con un arma ligera" también alcanzaron varias posiciones militares israelíes cerca del Líbano, añadió.
Dos reservistas militares israelíes y un civil resultaron heridos en uno de los ataques, según el ejército.