La fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, ha solicitado que el expresidente Donald Trump y su empresa abonen un total de 370 millones de dólares (unos 337 millones de euros) por "enriquecimiento ilegal" y por inflar el valor de sus bienes en documentos financieros durante más de una década.
La solicitud supone subir la cuantía en 120 millones de dólares más con respecto a la petición inicial y forma parte de un adelanto del argumento final de la Fiscalía que será presentado el 11 de enero ante el tribunal en el juicio.
La Fiscalía considera que Trump logró "beneficios ilegales" exagerando los resultado de sus empresas para así conseguir mejores condiciones en los préstamos.
La defensa de Trump también ha presentado su propio adelanto del argumento final en el que reduce todo a "errores accidentales" en las declaraciones de situación financiera. "Los errores ocurren muy a menudo en contabilidad. Si no hay indicios de fraude tales como ocultación, falsificación o engaño, no hay base para considerar fraudulentas estas declaraciones", ha resaltado.
El veredicto del juez Arthur Engoron --sin jurado-- incluirá la responsabilidad de Trump por el delito de fraude que el propio juez asumió al inicio del proceso, tal como solicitaba la Fiscalía. Resta por saber su decisión sobre otras seis reclamaciones más que podrían inhabilitar a Trump para desempeñar un cargo directivo en cualquier empresa con sede en Nueva York.