UNA visita de Estado “amistosa” y correspondiendo a una invitación presidencial, el mandatario de de Rusia, Vladimir Putin, viaja este martes a Corea del Norte, en medio de la preocupación de Estados Unidos y la acusación de Occidente en el sentido de que Pyongyang suministra armas a Moscú para la ofensiva en Ucrania.
El asesor diplomático de Vladimir Putin, Yuri Ushakov, presentó el viaje como un evento importante para ambos países, golpeados por sanciones occidentales. "Se firmarán varios documentos", entre los que habrá "documentos importantes, muy significativos", dijo.
Ushakov mencionó la "posible" firma de "un acuerdo de cooperación estratégica global", que sería una versión actualizada de un tratado firmado durante la última visita de Putin al país, en 2000.
El documento se modificará para adaptarlo a una "profunda evolución de la situación geopolítica mundial y regional", señaló.
El secretario general de la Otan, Jens Stoltenberg, afirmó que la visita de Putin muestra cuán necesitada está Rusia del apoyo de líderes autoritarios para llevar a cabo su ofensiva en Ucrania.
"Demuestra lo dependiente que es ahora el presidente Putin, y Moscú, de países autoritarios de todo el mundo", afirmó Stoltenberg ante la prensa en Washington.
El canciller ucraniano, Dmytro Kuleba, aludió a un "bromance solitario entre Putin y Kim".
"El mejor modo de responder a él es continuar reforzando la coalición diplomática para una paz justa y duradera en Ucrania y entregar más [...] munición a Ucrania", dijo Kuleba a la AFP.
Las potencias occidentales llevan meses acusando a los norcoreanos de entregar municiones a Rusia para su ofensiva contra Ucrania, a cambio de asistencia tecnológica, diplomática y alimentaria.
La Casa Blanca afirmó que Estados Unidos está "preocupado" por el acercamiento entre Rusia y Corea del Norte. "No nos preocupa el viaje. Lo que nos preocupa es la profundización de la relación entre estos dos países", dijo el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby.
Según Kirby, no sólo preocupa que "todavía se estén utilizando misiles balísticos norcoreanos para atacar objetivos ucranianos, sino [también] que podría existir una cierta reciprocidad que podría afectar a la seguridad en la península coreana".
Según Moscú, Putin llegará este martes en la noche a Pyongyang , donde asistirá a un concierto en su honor.
El dirigente ruso estará acompañado del canciller Serguéi Lavrov, del ministro de Defena, Andrei Belousov; de dos vice primeros ministros y del jefe de la agencia espacial rusa, Roscosmos.
Putin, que es objeto de una orden de arresto internacional de la Corte Penal Internacional, ha reducido sus viajes al extranjero, pero ha realizado algunos desplazamientos para visitar a aliados clave, como China.
Tras visitar Corea del Norte, el presidente ruso viajará a Vietnam, el 19 y el 20 de junio.
El desplazamiento tendrá lugar nueve meses después de que Putin recibiera a Kim en el Extremo Oriente ruso, donde ambos mandatarios se cubrieron de elogios, pero no cerraron -al menos de forma oficial- ningún acuerdo.
Las potencias occidentales, Corea del Sur y Ucrania acusan a Pyongyang de enviar armas a Moscú para la ofensiva en Ucrania, en violación de las sanciones impuestas por la ONU a Corea del Norte.
Washington y Seúl afirman que, a cambio, Rusia proporcionó ayuda a Pyongyang para su programa de satélites y envió ayuda para hacer frente a la escasez alimentaria del país.
El miércoles, Kim Jong Un ensalzó los lazos "inquebrantables, de hermanos de armas" entre Pyongyang y Moscú, que datan de la época soviética.