Rebeldes sirios derribaron el sábado un avión ruso en la provincia de Idlib (noroeste) y mataron en un enfrentamiento a tiros al piloto, que había logrado saltar en paracaídas, indicaron el ejército ruso y la organización Observatorio sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Al tocar tierra, el piloto fue rodeado por los rebeldes y utilizó su arma, y luego fue abatido, según esas fuentes.
"Un avión ruso Sujoi-25 se estrelló mientras volaba sobre la zona de distensión [militar] de Idlib. El piloto tuvo tiempo de anunciar que se había eyectado en la zona, bajo control de combatientes del Frente Al Nosra. El piloto murió mientras combatía contra los terroristas" precisó el ministerio ruso de Defensa mediante un comunicado.
"El piloto murió mientras peleaba con rebeldes islamistas que habían derribado su avión y que lo iban a capturar" indicó por su parte el OSDH, que cuenta con sus propias fuentes en Siria.