Seis detenidos por intento de "magnicidio" contra Maduro | El Nuevo Siglo
Foto AFP.
Domingo, 5 de Agosto de 2018
Agence France Presse

Seis personas han sido detenidas acusadas de intentar asesinar el sábado al presidente venezolano, Nicolás Maduro, con drones cargados de explosivos, informó este domingo el ministro de Interior y Justicia, Néstor Reverol. 

"Tenemos hasta ahora seis terroristas y sicarios detenidos, varios vehículos incautados; se han practicado varios allanamientos a hoteles en la capital (Caracas) donde se han recabado importantísimas evidencias", señaló Reverol durante una alocución en la televisora estatal.

El ministro precisó que el intento de "magnicidio" se ejecutó con dos drones controlados a distancia y cargados cada uno con un kilogramo de explosivo C4, "capaz de hacer daño efectivo en un radio de aproximadamente 50 metros". 

"Una de las aeronaves sobrevoló la tribuna presidencial con el fin de activar a distancia la sustancia explosiva (...), pero con la instalación de equipos inhibidores de señales se logró desorientar al dron, activándose fuera del perímetro planificado por los sicarios", explicó Reverol. 

La segunda aeronave -según el funcionario- perdió el control, cayó y detonó en un edificio cercano al acto militar en el que se encontraba Maduro, en conmemoración de los 81 años de la Guardia Nacional. 

"Se trata de un delito de terrorismo y magnicidio en grado de frustración (...). Están identificados plenamente los autores materiales e intelectuales dentro y fuera del país, no se descarta en las próximas horas otras detenciones", acotó Reverol. 

El ministro reiteró que hay siete militares lesionados por lo ocurrido, "tres de ellos con pronóstico reservado". 

Reverol aseguró que sobre uno de los detenidos pesaba una orden de captura por el ataque el 6 de agosto de 2017 al fuerte militar de Paramacay, en la ciudad de Valencia (norte), donde una veintena de hombres se enfrentaron durante horas con los custodios de las instalaciones. 

Dos de los atacantes fueron abatidos, ocho detenidos y el resto escapó con armas. El grupo estaba comandado por el excapitán de la Fuerza Armada Juan Carlos Caguaripano, detenido junto con uno de sus compañeros el 11 de agosto.

Otro de los detenidos, indicó el ministro, había sido apresado durante las protestas que exigían la salida de Maduro en el poder en 2014 y luego había recibido un beneficio procesal.

 

Maduro alista su contraofensiva tras denunciar intento de magnicidio

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, respaldado por los militares, se alista para responder con puño de hierro a al intento de asesinato del que asegura fue víctima, haciendo temer una ola represiva contra sus adversarios. 

"Permanecemos incólumes y aferrados a las convicciones que nos caracterizan, apoyando de manera incondicional y con irrestricta lealtad a nuestro comandante en jefe", expresó este domingo el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, junto al alto mando militar.

En una declaración a la prensa, el general refrendó la denuncia de Maduro de que fue blanco el sábado de un ataque con drones cargados de explosivos, del que salió ileso. 

Con gran poder político y económico, la Fuerza Armada es considerada el principal sostén de Maduro, confrontado a un enorme rechazo popular por la debacle económica.

El ministro de Interior, Néstor Reverol, confirmó este domingo que hay seis detenidos por los hechos ocurridos cuando Maduro pronunciaba una discurso durante una parada militar en una concurrida avenida de Caracas.

Reverol indicó que dos drones, cada uno cargado con un kilo de explosivo C4, fueron desarticulados con inhibidores de señal. Uno cerca de la tarima presidencial. El otro perdió el control e impactó en un edificio cercano a la avenida Bolívar, dejando una columna de humo. 

También reiteró que siete militares resultaron heridos, tres de ellos con "pronóstico reservado".

Tras el incidente, Maduro prometió ir contra todos los responsables, "caiga quien caiga".

"¡Justicia!, ¡máximo castigo! No va a haber perdón, los que se han atrevido a ir hasta el atentado personal que se olviden de perdón, los perseguiremos y los capturaremos a donde se vayan a esconder ¡Lo juro!", advirtió la noche del sábado.

 

Explosión frente a Maduro

Un supuesto grupo rebelde, Movimiento Nacional Soldados de Franelas (camisillas), se atribuyó el ataque, según un comunicado leído en Youtube por la periodista opositora venezolana Patricia Poleo, radicada en Estados Unidos.

El grupo aseguró estar integrado por militares y civiles.

Según el gobierno, los drones detonaron frente a la tribuna presidencial y otros lugares de la céntrica Avenida Bolívar.

Un video difundido en redes sociales muestra el momento en que suena una explosión y la seguridad de Maduro, quien pronunciaba un discurso, se apresura a cubrirlo con escudos antibalas.

A diferencia del presidente, quien elevó la mirada y se mantuvo erguido, varios militares a su lado se agachan, tras lo cual el mandatario es evacuado. Su esposa, Cilia Flores, y varios altos funcionarios también estaban en la tarima.

"Mi primera reacción fue de observación, de serenidad, porque tengo confianza plena en el pueblo y en la Fuerza Armada", relató desde el palacio presidencial de Miraflores.

El fiscal general, Tarek William Saab, de línea oficialista, dijo que este lunes revelará las identidades de los detenidos. "Habrá una sanción implacable", advirtió Saab, quien fue testigo del incidente.

El fiscal sostuvo que uno de los drones grababa el acto. "Pude observar cómo el dron que filmaba los hechos explotó", dijo a CNN.

Luego de ello, se vio a decenas de militares romper filas y correr desordenadamente. 

La transmisión del acto en cadena de radio y televisión fue cortada. Fotografías muestran a un militar con la cabeza ensangrentada.

Un apartamento en un edificio cercano sufrió un incendio. Un policía que pidió el anonimato dijo a la AFP que desde allí habrían salido los drones y que uno estalló; pero otras versiones señalan que en realidad explotó accidentalmente una bombona de gas.

El consejero de Seguridad Nacional de Donald Trump, John Bolton, negó este domingo la vinculación de Estados Unidos en el incidente. "Puedo afirmar categóricamente que no hubo absolutamente ninguna participación del gobierno estadounidense en lo sucedido allí", señaló Bolton en la cadena Fox.

 

¿Represión? 

La advertencia de Maduro generó temores por una ofensiva contra opositores, en un país donde se denuncia que el gobierno tiene unos 248 "presos políticos", entre ellos el dirigente Leopoldo López.

"Alertamos que lo hasta ahora anunciado por el gobierno madurista abre la puerta a una persecución y ola de represión que puede justificar cualquier cosa", afirmó Nicmer Evans, disidente del chavismo y dirigente del opositor Frente Amplio.

"¡No queremos atentados ni auto-atentados, no queremos golpes ni auto-golpes! ¡Tampoco queremos más hiperinflación, más hambre ni más muerte por falta de medicinas!", expresó por su parte Jesús Torrealba, exsecretario de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática, hoy dividida.

Maduro se mostró desafiante, advirtiendo que ahora está "más decidido que nunca a seguir el camino de la revolución".

Exconductor de autobús de 55 años, Maduro llegó al poder en 2013 tras la muerte de Hugo Chávez, quien gobernaba desde 1999.

Pese a la debacle económica, fue reelegido el 20 de mayo en unos controvertidos comicios que la oposición boicoteó por considerarlos ilegítimos.

Su reelección es desconocida por gran parte de la comunidad internacional.