A comienzos de esta semana y en retaliación por las sanciones que le ha impuesto Japón por su ‘ofensiva especial’ en Ucrania, Rusia abandonó las negociaciones de paz que mantenía desde el final de la Segunda Guerra Mundial y que viran, especialmente, en torno a la soberanía de las Islas Kuriles.

Como se sabe, Rusia ejerce, desde el fin de dicha guerra global, el dominio sobre las mismas, originalmente territorios del país nipón. Es sobre ello que han versado décadas de conversaciones, las que ahora decidió suspender el Kremlin argumentando la “imposibilidad" de mantener diálogos "con un país que ha tomado una posición abiertamente hostil y que busca causar daño a los intereses de nuestro país".

Para entender esta acción rusa y qué implicaciones podría tener no solo para la seguridad internacional sino para la soberanía de este archipiélago, EL NUEVO SIGLO conversó con el doctor en Relaciones Internacionales, docente en la Universidad de Buenos Aires y experto en Eurasia, Alberto Hutschenreuter, quien explicó por qué esta decisión podría perjudicar a Rusia en sus eventuales planes de modernizar su economía.

Así mismo, explicó qué podría pasar con las Islas Kuriles y fue claro en señalar que esta acción no tendrá consecuencias significativas en la coyuntura actual.

EL NUEVO SIGLO: Antes de entrar en la filigrana de la decisión rusa de suspender las negociaciones con Japón sobre las Islas Kuriles, ¿este impase histórico en qué consiste?

ALBERTO HUTCHENREUTER: El conflicto entre Rusia y Japón que implica a las islas Kuriles o los denominados “Territorios del norte”. Con la invasión rusa a Ucrania, necesaria y evidentemente ha quedado, por lo menos por ahora, lateralizado y sin posibilidades de avanzar en materia de negociaciones porque fueron suspendidas.

Dicho eso, hay que entender que estas fueron conversaciones que siempre marcharon, aunque a veces retrocedieron, e incluso en la era de Boris Yeltsin parecía que podrían llegar a un acuerdo. Pero hoy, con el contexto de guerra que tenemos en Ucrania y con las presiones que ha ejercido occidente sobre Rusia, evidentemente las posibilidades de que estos dos países avancen en un acuerdo son muy, pero muy bajas.

La decisión de Rusia pone de manifiesto, además, que éste es un conflicto que evidencia cómo la Segunda Guerra Mundial no terminó allí. No obstante, hay que tener presente que este es un conflicto geopolítico y territorial en el que Japón aspira a recuperar esos territorios y hasta el día de hoy Rusia se ha negado a entregarlos.

ENS: ¿Y esta ruptura de las negociaciones, qué implicaciones puede tener para la comunidad internacional?

AH: Desde el punto de vista de las implicaciones que esta suspensión en las negociaciones puede tener, esta decisión no es demasiado negativa ni para la seguridad internacional, ni para la seguridad regional. Pero ¡Ojo! Tampoco es una decisión del todo positiva para Rusia y voy a explicar por qué.

Japón es un país fuerte, con crecimiento económico y Rusia necesitará, en las próximas décadas, transformar su economía, hacerla más moderna y diversificarla puesto que depende mucho de sus materias primas. Y hay dos actores que podrían ser claves en la modernización económica de Rusia: Alemania y Japón.

Estos países podrían aportar mucho a la necesaria modernización de la economía rusa y evidentemente la invasión a Ucrania ha generado tensión en la relación del Kremlin con Alemania, un actor con el que, salvo en el marco de las dos guerras mundiales, siempre ha tenido una buena relación.

Y la importancia que reviste Japón para la modernización de la economía rusa también podría ser enorme. Pero las posibilidades ahora quedan en entredicho, puesto que es un aliado de Estados Unidos y este es el país que maneja las compuertas de la presión financiera, tecnológica y energética que se le imponga a Rusia.

Así que, por lo menos por ahora, las consecuencias impactarán sobre todo las cuestiones relativas a las necesidades económicas de Rusia.

ENS: ¿Y esta decisión que implicaciones podrá tener para la soberanía de las Kuriles?

AH: La principal implicación posiblemente sea un enfriamiento de las negociaciones ruso-niponas (que ya venían un poco frías desde antes de los hechos en Ucrania, incluso Japón se quejaba de las visitas de funcionarios rusos a la zona). Y desde un escenario más riesgoso, Estados Unidos podría considerar militarizar más a Japón.

ENS: Esta decisión, ¿podría tener alguna implicación a largo plazo? Es decir, ¿Japón podría terminar implicado de alguna manera en la coyuntura Ucrania-Rusia?

• Le puede interesar: OEA aprueba resolución sobre Ucrania y Kiev pide que suspenda a Rusia

AH: Sin duda esta es una de las secuelas más claras que ha tenido la guerra en Ucrania, pero hay que tener siempre presente que Japón, más allá de la ubicación que ocupa en el mundo, tiene una relación preferencial (particularmente de seguridad) con Estados Unidos. De hecho, hay un tratado de defensa entre ambos países, el de Cooperación y Seguridad Mutua. Así que Japón siempre privilegiará, en su política exterior, su relación con la Casa Blanca.

Recordemos que Japón hace parte, como bien hizo en denominarlo el autor, John Mearsheimer, del área del “pacificador americano” (Europa y Asia del Norte en donde está representada la presencia de Estados Unidos). En ese sentido, es un país de oriente pero que forma parte de la comunidad internacional (Estados Unidos, Europa Occidental, Japón, Corea del Sur y Australia), y en este arco enorme que abarca buena parte del mundo, en donde las relaciones son firmes y robustas, Japón va a responder al lugar estratégico en donde se encuentra. Esto implica que va a seguir a Estados Unidos.

No veo cambios derivados de la decisión rusa de retirarse de las negociaciones con Japón, y de hecho en función de lo que está ocurriendo en Ucrania, creo que habrá un descenso de cooperación de la comunidad internacional en el conflicto Tokio-Moscú.

De manera que, como lo mencioné inicialmente, este es un tema que quedó lateralizado y sin posibilidades de avanzar en materia de negociaciones. Alcanzar una solución al conflicto geopolítico entre Rusia y Japón están lejos.

Aun así, no se puede descartar que en un futuro haya una negociación en función de la siguiente ecuación: Japón tiene recursos y tecnología, pero no tiene territorio y siempre ha querido más. Y Rusia necesita dinero, modernizar su economía y le sobra territorio.

Pero por ahora y en función de lo que está pasando en Ucrania y de la política de aislamiento que occidente impuso a Rusia, es muy difícil. El Kremlin está verdaderamente aislado y aunque hoy mantiene relaciones con otros países como India, China y otros Estados de Medio Oriente, la comunidad occidental le ha cerrado todas las compuertas.

Proyecciones

ENS: ¿Qué puede pasar en los próximos días?

AH: Si se logra un acuerdo con Ucrania, a mediano plazo habría una recomposición de negociaciones, pero tengo una conjetura relativa sobre este conflicto, más allá de lo que implicó la agresión de Moscú a Kiev y de que hubiera violentado la integridad territorial de Ucrania (uno de los grandes principios del Derecho Internacional Público).

Creo que aquí hay una política de grandes potencias en la que el objetivo, sobre todo de Estados Unidos (más que de occidente), es la de crear una situación en la que Rusia afronte problemas relativos con su economía.

Sin duda Rusia es la responsable de haber perpetrado un acto de agresión internacional, pero hay otros responsables en relación con lo que fue el proceso del conflicto, en donde Estados Unidos ha jugado un rol importante. Este es un conflicto que tiene que verse como un tema de grandes potencias. /Redacción internacional