Venezuela: entrar ayuda humanitaria es un desafío | El Nuevo Siglo
Foto archivo Anadolu
Lunes, 4 de Febrero de 2019
Redacción internacional

LA AYUDA HUMANITARIA para Venezuela, prometida por el presidente interino Juan Guaidó, está en proceso de recolección, así lo anunció el líder opositor desde Caracas, desvirtuando los rumores que rondaron el fin de semana sobre su posible llegada a Cúcuta.

El rumor tomó fuerza luego de que Freddy Bernal, uno de los alfiles del chavismo y encargado de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), apareciera en la madrugada del 2 febrero en el Puente Internacional Simón Bolívar, hablando de sus credenciales militares con miembros de la Policía Nacional de Colombia.

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Algunos sectores interpretaron el viaje de Bernal a San Antonio del Táchira, Venezuela, como un bloqueo a la posible llegada humanitaria, situación que, por ahora, no se ha presentado. Es cierto que el chavismo no ha recibido de buena manera la llegada de este tipo de ayuda para los venezolanos, pero por lo pronto lo único que se sabe, de acuerdo al Presidente Interino, es que los productos están llegando a centros de acopio.

La ayuda humanitaria es una prioridad para el también Presidente de la Asamblea Nacional, quien suele hablar de entre 250.000 y 300.000 venezolanos “al borde de la muerte”. El domingo, en charla con The New York Times, Guaidó estimó que la gente necesita la ayuda. “Literalmente, tienen una sentencia de muerte si no reciben atención urgente”.

Las últimas dos semanas la Comisión Especial de Seguimiento a la Ayuda Humanitaria, brazo del Congreso, ha estado encargada de tramitar el acopio, el transporte y el manejo de las toneladas de productos que están destinados a entrar a Venezuela, siempre y cuando la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) lo permita.

Según Miguel Pizarro, diputado de Primero Justicia y miembro de la Comisión, existe una colaboración entre diferentes sectores que incluyen a la Conferencia Episcopal y diferentes ONG. “Esta semana se realizará el primer envío de ayuda humanitaria para Venezuela al centro de acopio de Cúcuta y próximamente se realizarán otros envíos a un centro de acopio en Brasil y a otro centro por anunciar”, explicó.

Fuentes consultadas por EL NUEVO SIGLO dijeron que las primeras donaciones estarían llegando a mediados de esta semana, probablemente entre jueves y viernes. Esta ayuda estará localizada en Cúcuta, que se convertirá en un centro de acopio para poder trasladar enseres, alimentos y, sobre todo, medicinas a Venezuela.

El puente binacional Tienditas podría ser el punto de recepción de la ayuda humanitaria, según La Opinión de Cúcuta. La construcción une a los dos países desde Cúcuta hasta el caserío de Tienditas de la ciudad de Ureña, otro de los pasos fronterizos.

No todas las organizaciones internacionales están involucradas en el traslado de la ayuda humanitaria. El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), en comunicado, aclaró que no tiene “ningún rol” en la entrega de asistencia del gobierno de Estados Unidos a Venezuela.

Hasta ahora, para organizar y repartir la ayuda humanitaria, se han incluido organizaciones como Usaid, agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, ONG`s dedicadas a temas de derechos humanos y comunidades de expatriados.

El gobierno de Guaidó, además, recibió el apoyo económico de Alemania, que anunció 5 millones de euros destinados a ayuda humanitaria, y de Canadá, cuyo compromiso fue de 53 millones de dólares adicionales. Este monto se une a los 13 millones de dólares que Mike Pompeo, secretario de estado norteamericano, prometió en una asamblea extraordinaria en la Organización de Estados Americanos (OEA).

“Van a secuestrarla”

La semana comenzó con anuncios de lado y lado en referencia a la ayuda humanitaria. Desde la Asamblea Nacional, Guaidó cargó contra Nicolás Maduro y dijo que el chavismo tiene como plan “secuestrar” el contingente de medicinas, alimentos y enseres para incluirlos dentro de los CLAP.

“Van a tener un componente muy importante las Fuerzas Armadas, pero también le vamos a pedir al pueblo venezolano para custodiar esta ayuda”, indicó el Mandatario Interino. Sus denuncias tienen relación con la visita de Bernal a la frontera.

A pesar de que la ayuda humanitaria ya es un hecho, el chavismo se ha opuesto a que entre a Venezuela. Nicolás Maduro ha definido dicha colaboración como “una promesa falsa” de una supuesta ayuda humanitaria. “No somos mendigos de nadie”, afirmó ayer en la televisión pública, y agregó: “Quieren convertir esta patria en una colonia de mendigos. ¿Ustedes quieren ver a nuestra patria convertida en una colonia de esclavos?”.

Para el chavismo no existen motivos para que Estados Unidos envíe su apoyo humanitario. En entrevista en Salvados, programa español, el líder oficialista dijo que  “Venezuela no tiene una crisis humanitaria. Venezuela tiene una crisis política (…) Mucha gente se ha ido engañada”.

La posición del chavismo frente a que medicinas y alimentos donados entren al país  parece inamovible, por ahora. Desde Washington, para encarar el reto de que estos cargamentos puedan entrar a Venezuela, la representación de Guaidó en Estados Unidos anunció que el próximo 14 de febrero se realizará una conferencia internacional en la OEA sobre la ayuda humanitaria.

“Los representantes de los gobiernos, el sector privado y la sociedad civil participarán en la conferencia y evaluarán cómo pueden apoyar mejor al gobierno interino venezolano en la entrega de asistencia logística y material a los venezolanos que han sufrido una escasez de alimentos y medicamentos básicos desde hace mucho tiempo”, indicó la misión diplomática de Guaidó.

El Presidente Interino insiste en que los militares son los únicos que pueden ayudar a resolver la encrucijada humanitaria, permitiendo el ingreso por Colombia, Brasil y unos puertos del Caribe.

Por ahora, el chavismo mantiene la lealtad de las Fuerzas Armadas, haciendo inviable que se concrete su entrada. Parece ser que este será uno de los principales motivos para que eventualmente Guaidó y Maduro se sienten a dialogar.