Luego de una dilatada y fructífera existencia, en la que se destacó en diversas actividades, entre éstas la diplomacia y en especial la gastronomía, de la cual era un maestro, falleció Lácydes Moreno Blanco.
El Ministerio de Cultura le otorgó el año pasado el Premio a la Vida y Obra 2014 a este insigne colombiano.
Fue embajador en Cuba, Haití y Japón. “La perspectiva que me ha interesado siempre es la cocina como reflejo de culturas”, solía decir Moreno, quien publicó varios libros de investigación culinaria, que se convirtieron en bibliografía obligada para los estudiosos de nuestra tradición gastronómica. Entre sus libros sobresalen Diccionario de vozes culinarias, Cocina de siempre, Sabores del pasado y Recertas de la abuela.
Nació en Bourdeux (Francia), pero creció en Cartagena. Sus padres eran cartageneros. Demostró su vocación de periodista en el periódico El Fígaro, de Eduardo Lemaitre, donde trabajó. Además de los reconocimientos que obtuvo por su labor gastronómica, Moreno también fue elegido miembro de Número de la Academia Colombiana de la Lengua.