La operación conjunta entre la Policía de Bogotá y la Fiscalía desentrañó una cruda realidad oculta durante más de dos décadas. 'La Bestia II', un individuo de 62 años, fue aprehendido tras una denuncia presentada el 17 de noviembre, poniendo fin a una escalofriante carrera delictiva.
En un cruento modus operandi que abarcó múltiples regiones del país, 'La Bestia II', cuyo nombre real permanece bajo reserva judicial, se valía de su oficio como maestro de construcción y plomero para infiltrarse en la confianza de las familias, especialmente de aquellas con menores de edad. El subcomandante de la Policía de Bogotá, coronel Herbert Benavides, detalló que el arresto se llevó a cabo cinco días después de recibir la denuncia, revelando así un historial delictivo que se remonta a 1998.
El sujeto, originario de Boyacá, dejó un rastro de al menos siete casos documentados de abuso sexual. Su primera víctima, su propia sobrina discapacitada, fue ultrajada en 1998, lo que resultó en una condena de tres años de prisión. Sin embargo, esto no detuvo sus atrocidades, acumulando condenas adicionales en 2001, 2005 y 2006.
Su más reciente ataque, registrado en el barrio Socorro de la localidad de Kennedy, evidencia la persistencia de su depravación, ganándose la confianza de una familia extranjera para luego abusar de una menor de 12 años. Las autoridades, al revisar sus antecedentes, temen que 'La Bestia II' sea un violador en serie, con un patrón consistente de amenazas, ataduras y agresiones sexuales contra niños.
El investigador de la Policía, David Angarita, destacó: "Solicitamos ante la Dijín unos antecedentes donde podemos evidenciar que este tipo lleva desde el año 1998 actuando seguidamente contra niñas y niños de toda Colombia." A pesar de haber cumplido condena en 2004, fue liberado en 2007, retomando su escalofriante conducta en el departamento de Tolima y en Bogotá.
Este caso pone de manifiesto la urgencia de revisar los protocolos de seguimiento a personas liberadas después de cumplir condenas por delitos de abuso sexual, subrayando la necesidad de una acción coordinada entre la Policía y la Fiscalía para frenar a depredadores que, como 'La Bestia II', persisten en la perpetuación del horror.