La Fiscalía presentó cargos por fraude procesal contra Rafael Ricardo Santos, identificado como la "fuente humana falsa", y el agente de la SIJIN Fredy Alexander Gómez. Esta acusación se materializó tras la liberación de los implicados debido al vencimiento de los términos procesales. La entidad sostiene que ambos conspiraron para suministrar información falsa a una fiscal, buscando realizar interceptaciones ilegales a los contactos de Marelbyz Mesa y a una exempleada de Laura Sarabia tras la pérdida de dinero en la residencia de esta última.

El escenario judicial del caso Marelbyz Mesa se complica con recientes acusaciones de fraude procesal, cuestionamientos sobre libertades otorgadas y la imputación de un nuevo delito.

La acusación detalla el uso de alias 'Pini' y 'Pacho' por parte del subintendente Gómez y la "fuente humana" en la ejecución de las interceptaciones. Aunque el subteniente no rubricó ningún documento, la Fiscalía argumenta que su contribución fue esencial en el diseño del plan criminal. Respecto a Rafael Santos, la "fuente humana falsa", se le imputa mentir sobre su conocimiento de 'Pini' y su ingreso a la SIJIN. La Fiscalía señala inconsistencias en los testimonios de testigos e indiciados sobre la incorporación de la fuente humana al grupo de hurtos de residencias de SIJIN.

La complejidad legal se intensifica con la apertura de una investigación contra la fiscal Ángela Santana por presunta corrupción. La Fiscalía permitió el vencimiento de términos procesales, lo que resultó en la liberación de los acusados. El proceso enfrenta incertidumbre, ya que el Código de Procedimiento Penal exige la asignación del caso a otro fiscal. En un nuevo episodio, se revela que Alfonso Quinchanegua, policía de la SIJIN, enfrentará una acusación adicional por falsedad material en documento público. Se le imputa influenciar a fiscales y jueces para justificar la interceptación de comunicaciones de una exempleada de Laura Sarabia.