En cuatro días más de mil personas han tenido que salir de sus lugares de residencias por acciones violentas entre la guerrilla del Eln y el grupo criminal Clan del Golfo, según anunció la Defensoría del Pueblo. 

Según la entidad, las regiones más afectadas por los enfrentamientos de ambos grupos son el Bajo Cauca, sur de Córdoba y los límites entre Boyacá y Casanare.

Según el organismo humanitario, el primer hecho se presentó en municipio de Magüí Payán, Nariño, por enfrentamientos entre miembros del ELN y disidencias de las Farc, causando el desplazamiento forzado de 172 personas.

Un segundo desplazamiento se produjo luego del asesinato del presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda San Pedrito de San José de Uré, Córdoba, el 18 de enero.

"Debido a este hecho, 75 familias (375 personas) tuvieron que salir de la zona por las amenazas que recibieron de miembros del grupo denominado “Caparrapos” y por los inminentes enfrentamientos entre estos y el Clan del Golfo", precisó la Defensoría.
 

Otro hecho que se presentó en el país fue el 19 de enero en el pueblo Zenú donde 383 personas tuvieron que salir de la zona por presencia de un grupo armado.

Boyacá también está en riesgo debido a los constantes actos de violencia y numerosas familias que tienen que salir de la región.