La Gobernadora del Chocó, Nubia Carolina Córdoba-Curi, alertó que un nuevo paro armado anunciado por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) tendrá un impacto severo en más de 50 mil personas en la subregión San Juan. A partir del 11 de agosto, esta medida implicará el confinamiento de la población y la suspensión de actividades comerciales, educativas y de prestación de servicios en seis municipios de la región.
En un mensaje publicado en su cuenta de X, Córdoba-Curi expresó su profunda preocupación por la escalada de violencia y la creciente crisis humanitaria en el Chocó. La gobernadora subrayó que la situación es el resultado de la intensa disputa territorial entre el ELN y el Clan del Golfo, la cual ha agravado las condiciones de vida en la región.
"Se ha anunciado un nuevo paro armado por parte del ELN en la subregión San Juan apelando a los combates con el Clan del Golfo, recrudeciendo la crisis humanitaria en la que se ha mantenido el Chocó por la disputa del territorio. A partir de hoy estarán confinadas más de 50 mil personas y detenida toda actividad comercial, educativa y de prestación de servicios en 6 municipios por cuenta de una orden en donde la consecuencia para la gente por no atender es la vida."
Se ha anunciado un nuevo paro armado por parte del ELN en la subregión San Juan apelando a los combates con el Clan del Golfo, recrudeciendo la crisis humanitaria en la que se ha mantenido el Chocó por la disputa del territorio. A partir de hoy estarán confinadas más de 50mil…
— Nubia Carolina Córdoba-Curi (@NubiaCarolinaCC) August 10, 2024
El ELN, a través del Frente de Guerra Occidental Omar Gómez, justificó su decisión con base en el aumento de la confrontación armada en los ríos San Juan, Sipí y Cajón, así como en la carretera que conecta Nóvita con Torrá. El grupo guerrillero acusa al Clan del Golfo de utilizar embarcaciones civiles para sus operaciones y extorsionar a los trabajadores del territorio, señalando la complicidad de las Fuerzas Militares y de Policía.
El comunicado del ELN detalla: "Debido al contexto de guerra que hay en la región, la confrontación tiende a agudizarse. Los paramilitares del Clan del Golfo, en el río San Juan, en contubernio con las Fuerzas Militares y de Policía (quienes toman posiciones y se ubican para cubrirlos y abrirles campos de acción), permiten de manera cómplice que estos mercenarios estén utilizando embarcaciones de la población civil para movilizarse, colocando en riesgo a la población y a los bienes de estas comunidades."
La gobernadora Córdoba-Curi instó a la comunidad internacional y a las entidades de derechos humanos a prestar atención a la situación en el Chocó, resaltando la necesidad de una solución que tenga en cuenta las particularidades del territorio y los derechos de sus habitantes. La crisis continúa profundizándose mientras la región enfrenta desafíos significativos en medio del conflicto armado.