El no cierre de los tanques de reserva de los edificios el día del racionamiento y el alto consumo el día posterior al turno de restricción están generando oscilaciones en las presiones del agua que dificultan y demoran el restablecimiento del servicio, especialmente en horas de máximo consumo.

La Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) explicó que el esquema de restricción de agua busca que entre todos apliquemos un consumo solidario de agua para que alcance mientras se normaliza el llenado de los embalses del sistema Chingaza, los cuales vienen en descenso por la falta de lluvias.

Sin embargo, debido a las altas temperaturas presentadas, en las últimas semanas el consumo de la ciudad se ha incrementado, por encima de lo esperado, durante los esquemas de restricción originando oscilaciones de presión durante la prestación del servicio.

Esta situación se evidencia en mayor medida en las zonas más occidentales de Bogotá, en los sectores de Suba, Engativá, Ciudad Kennedy, Fontibón y Bosa, afectando directamente la prestación del servicio en los Municipios de Funza, Mosquera y Madrid.

También se está presentando sobreconsumos en los días posteriores a la restricción, especialmente en el turno uno. Esta situación genera que se incrementen los tiempos de normalización principalmente en los sectores más alejados en la prestación del servicio.

Desde la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) se indicó que es necesario entender que el comportamiento con el consumo afecta las condiciones de prestación del servicio de agua los otros habitantes.

Si logramos tener un consumo racional y si en los días de restricción no utilizamos los tanques de almacenamiento, las oscilaciones de presión de agua no serán extremas y se podrá tener un servicio adecuado, disminuyendo los tiempos de normalización en los días posteriores a la restricción.