A pesar de que la votación de las presidenciales se desarrolló, con contadas excepciones, sin mayor afectación al orden público en todo el país, luego del cierre de la jornada se produjo un hecho grave en el Meta, en donde una jurado fue asesinada, en un ataque que las autoridades atribuyeron a las disidencias. En materia electoral, más de 21 millones de colombianos acudieron a las urnas, bajando las cifras de abstención, pese a que el día estuvo pasado por agua en varias regiones y que el puente festivo hizo que muchos se fueran de paseo.

El ministro de Defensa, Diego Molano, indicó en Twitter que “culminada jornada electoral en vereda Nueva Colombia de Vista Hermosa, Meta, cobardes disidencias de las Farc asesinan a jurado de votación y provocan heridas a oficial de nuestro Ejército, mientras transportaban material electoral”.

Según se informó, el ataque armado se produjo cuando los jurados, acompañados de soldados, transportaban el material electoral.

La Misión de Observación Electoral (MOE) reaccionó señalando al respecto que "la jurado asesinada y el soldado herido se encontraban transportando material electoral que, de acuerdo con los reportes, no se vio afectado".

La jurado de votación asesinada fue identificada como Nely Bedoya Vásquez y el uniformado herido pertenece a la fuerza de Tarea Conjunta Omega.

Las elecciones presidenciales de ayer han sido de las más observadas de la historia porque contaron con la participación de 27 misiones internacionales y varias nacionales, entre otras de la Unión Europea y la Organización de Estados Americanos, así como las más vigiladas por la Fuerza Pública, con cerca 300 mil hombres en todo el territorio nacional para cuidar las más de 112 mil mesas de votación.

El ministro Molano, al finalizar los comicios, había dicho que la jornada electoral transcurrió “en total normalidad y garantizándose la seguridad y tranquilidad de todos los colombianos para salir a votar”.

Agregó que, en materia de orden público, “tuvimos tres artefactos explosivos, dos de ellos que fueron accionados sin afectar a la Fuerza Pública ni al proceso electoral, y en un caso particular uno de nuestros soldados ha sido herido, y ya fue atendido por nuestro Ejército”.

También se conoció que en la vereda La Catalina, del municipio La Macarena (Meta), activaron un explosivo cerca de un puesto de votación, sin que por fortuna se presentaran heridos.

Mientras que el PMU (Puesto de Mando Unificado) instalado en la Sala Estratégica de la Policía Nacional, el cual se encargó de vigilar el desarrollo de los comicios, reportó normalidad generalizada en todas las regiones y dos capturas por delitos electorales en Nariño y Cauca.

Otros reportes

La Fiscalía y la Policía reportaron 17 capturas que no tuvieron que ver con las elecciones, pues fueron por orden judicial en los departamentos de La Guajira, Antioquia, San Andrés, Nariño, Tolima, Magdalena, Arauca, Cesar y Bolívar.

“Las detenciones están relacionadas con personas requeridas por delitos como violencia intrafamiliar; uso de documento falso; acto sexual violento; fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o de municiones; acceso carnal violento; tentativa de homicidio; entre otros”, detalló la Fiscalía.

La Seccional Caquetá de la Fiscalía abrió noticia criminal con ocasión de una denuncia interpuesta por la coordinadora de un partido político en ese departamento, quien aseguró que fue perseguida e intimidada. La Policía Nacional adoptó las medidas de seguridad correspondientes.

De otra parte, en Bogotá se denunció el hurto de tres computadores y otros elementos en la sede del candidato Sergio Fajardo, en la localidad de Teusaquillo. Asimismo, en Pasto (Nariño) fue capturado en situación de flagrancia un hombre que habría presentado un certificado falso que lo acreditaba como testigo electoral.

Agregó la Fiscalía que, a través de la Unidad de Recepción Inmediata para la Transparencia Electoral (Uriel), se recibieron 27 reportes de posibles delitos electorales como: constreñimiento al sufragante, corrupción al sufragante, tráfico de votos, perturbación del certamen democrático, voto fraudulento, calumnia y cohecho.

También se reportaron algunas alteraciones de orden público en Caquetá, Meta, Atlántico, Quindío, Guaviare y Arauca; mientras que en la vereda Normandía, en Puerto Rendón (Arauca), se presentaron enfrentamientos entre integrantes de disidencias de las Farc y el Eln.

En Armenia, cerca de la Universidad del Quindío, desconocidos lanzaron panfletos alusivos a grupos armados delincuenciales.

Por su parte, la Procuraduría General de la Nación recibió 96 quejas al cierre de las urnas de las elecciones presidenciales, la mayoría en Bogotá, Antioquia, Atlántico, Santander, Caldas, Risaralda, Casanare y La Guajira.

Se trasladaron puestos

El ministro del Interior, Daniel Palacios, informó que las elecciones se desarrollaron en el país en calma y que por causas de las lluvias hubo necesidad de trasladar 31 puestos de votación. “Se ha dispuesto todo el acompañamiento de la Fuerza Pública para hacer esa actividad”, dijo.

El traslado de puestos de votación se presentó en los departamentos de Arauca, Cundinamarca, Norte de Santander, Bolívar, Atlántico, Casanare y Nariño.

Palacios indicó también que ante la Uriel se presentaron 584 denuncias de presuntas irregularidades: 506 en Colombia, ocho en España, seis en Estados Unidos, cuatro en Canadá y otras en varios países.

Las regiones en las que se registró el mayor número de denuncias por supuestas irregularidades son Bogotá con 112 quejas, Antioquia con 101, Valle con 51, Risaralda con 26 y Santander con 25.

En cuanto al motivo de las quejas, 98 fueron por constreñimiento al sufragante y 81 por intervención en política de servidores públicos.

En tanto que la Misión de Observación Electoral (MOE) indicó, en un informe sobre irregularidades que conocieron en el terreno los 3.539 observadores desplegados en 467 municipios, así como en 46 consulados de 19 países, que en algunas mesas había jurados con algún distintivo de campaña o al inicio de la jornada en las mismas no estaban los seis integrantes que exige la ley o incluso en algunas no había ninguno.

Recibió reportes de testigos electorales que manifestaron problemas en el proceso de acreditación, como en Guarne, Medellín, Remedios y Yondó, en Antioquia, así como en Cali, en el Valle, y Bogotá.

En este sentido, en algunos casos los testigos tuvieron problemas porque presentaron fotocopia de la acreditación que entregó la Registraduría, lo que dificultó su identificación.

También la MOE recibió quejas por compra de votos a través de entrega directa de dinero en efectivo y movilización de personas hacia los puestos de votación; así mismo, por supuesta presión de empresas privadas para sufragar por una determinada candidatura