Los próximos 17 y 24 de mayo se llevará a cabo la audiencia de acusación al expresidente Álvaro Uribe por los delitos de soborno a testigos en acusación penal y fraude procesal, después de que el fiscal del caso cambió la línea, pues los dos colegas que le antecedieron pidieron archivar el proceso por falta de pruebas.
El exmandatario insiste en su inocencia y, en ese sentido, en los últimos días inició una ofensiva mediática con argumentos fundamentados en hechos para demostrar que no incurrió en actuaciones irregulares.
Al mismo tiempo, aprovechó la presencia en Bogotá de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para pedir que vigile su proceso, porque sostiene que no ha tenido garantías y es víctima de un montaje.
La causa contra el exmandatario fue abierta en 2018 por la Corte Suprema de Justicia, después de archivar una denuncia que éste formuló contra el senador Iván Cepeda, señalándolo de manipular testigos en las cárceles en su contra para que lo vincularan con el paramilitarismo.
La Sala de Instrucción de la Corte Suprema señaló en esa oportunidad que “después de emitido este archivo, al parecer, con la aprobación del senador (Uribe), personas allegadas a él habrían emprendido probables actos de manipulación de testigos”.
En agosto de 2020, la Corte Suprema dictó medida de aseguramiento domiciliario con carácter preventivo contra el expresidente, quien permaneció en esa situación por 67 días. Durante este tiempo, Uribe renunció a su escaño de senador, con lo cual el caso salió de la Corte a la Fiscalía.
El testigo principal contra Uribe en el caso de manipulación de testigos es Juan Guillermo Monsalve, quien paga 40 años de prisión y fue uno de los testimonios de exparamilitares en un debate que en el año 2014 realizó Cepeda en el Congreso contra el exmandatario por los supuestos vínculos con grupos de autodefensa.
Tras el anuncio de la Fiscalía de que lo llamará a juicio, Uribe Vélez ha intensificado su presencia en la red X –en la que tiene 5,3 millones de seguidores– para manifestar su verdad, haciendo precisiones por escrito y colgando videos con pronunciamientos sobre cómo se ha adelantado el caso judicial, denunciando según él la violación al derecho a un debido proceso, así como enfatizando que nunca buscó testigos para que declararan a su favor ni les hizo ofrecimientos.
También el partido Centro Democrático, del cual Uribe es fundador y el líder natural, ha publicado varios comunicados manifestando que cree en su inocencia, así como pronunciamientos del exmandatario defendiéndose de las acusaciones.
Pruebas del montaje
Uribe hizo varios videos denunciando el montaje, según él, para incriminarlo. En uno se refiere a Enrique Pardo Hasche, quien ha sido señalado de presionar a Juan Guillermo Monsalve para que se retractara de los señalamientos en contra del exjefe de Estado.
“Pardo Hasche, a quien nunca he conocido, era compañero de celda de Monsalve. En todas las instancias ha declarado que Monsalve se quejaba insistentemente de haber mentido al senador Cepeda con la acusación de paramilitares a mi hermano y a mí”, dijo el exmandatario en un video que subió a redes, al que denominó ‘Serie de pruebas del montaje: las interceptaciones ilegales al teléfono de Álvaro Uribe Vélez’.
Agregó que “le decía que se pasara para el lado de Uribe, en las grabaciones no aparece lo que decía Monsalve y me acusa, entonces dos presos conversando en la cárcel… Eso de que Monsalve iba a grabarlo cuando eran dos compañeros de celda, muestra el ánimo de montaje de Monsalve y que solamente aparezca Pardo Hasche y que no aparezca lo que Monsalve decía en esas conversaciones y que me acusó es una falta grave a las garantías procesales, a las garantías de la democracia”.
En otro video, Uribe pone en tela de juicio la legalidad de la interceptación a su teléfono, cuando la Corte Suprema ordenó que esto se hiciera al excongresista Nilton Córdoba, investigado por corrupción.
"El magistrado Barceló, de la Corte Suprema, ponente inicial del proceso en mi contra, que mantuvieron secreto y se lo negaron a mis abogados, ordenó interceptar el teléfono del representante Nilton Córdoba. Cuando ya habían adelantado escuchas, interceptaciones, el operador les dijo: 'estoy escuchando es a Álvaro Uribe' (...) él les advirtió el error; sin embargo, le dijeron: 'siga'", aseguró Uribe.
En otro video, el exmandatario dijo que "el senador Cepeda ha hecho contribuciones económicas, de dinero, a la ONG de Defensa de los Presos Políticos. Esa ONG le entregó aproximadamente 12 millones de pesos a la familia del recluso Monsalve. Monsalve, condenado por secuestro y otros delitos graves. Monsalve, el mismo que ha acusado a mi hermano y a mí, mentirosamente, de relaciones con los paramilitares”.
En otra grabación, Uribe se refirió a Deyanira Gómez, exesposa de Monsalve. "La médica de Deyanira es mencionada como integrante de las Farc, así aparece en informes de inteligencia militar y también por relatos periodísticos obtenidos en conversaciones con ciudadanos de su municipio cundinamarqués (...) fue contratada por la cárcel como médica, allí se conoció y se convirtió en esposa del recluso Monsalve”, dijo.
Agregó el líder del Centro Democrático que esta mujer “contribuyó a ingresar los dos relojes y grabadoras, relojes que nunca entregaron a la justicia. Esa trampa es otro indicativo del montaje, la echaron de un trabajo y dijo que era por influencia mía; los empleadores, a quienes no conozco, en comunicado público explicaron que el despido fue por desempeño laboral”.
Pedido del expresidente a la CIDH
En reunión el pasado jueves con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Uribe Vélez entregó un informe detallado sobre su caso judicial, en donde recoge las pruebas que demostrarían el montaje que ha sido orquestado en su contra. Es la primera vez que el exmandatario pide ayuda de este organismo para que vigile que se garanticen sus derechos en este proceso.
“Todas las nuevas pruebas que se practicaron me favorecen ampliamente. Entonces, yo quiero preguntar esto, o plantear esta duda: si entre octubre y la fecha no hay un hecho nuevo o una prueba en mi contra, ¿cuál es el motivo para que cambien bruscamente la orientación de los dos fiscales que propusieron la preclusión?”, subrayó Uribe.
El exmandatario puso de presente que “yo nunca he tomado la decisión de buscar testigos. Mi decisión era verificar y enviar todo a la Corte”.
Sobre el presunto soborno a Monsalve, por medio de su entonces abogado Diego Cadena, Uribe dijo que “si yo hubiera tenido interés en sobornarlo, habría mandado a que lo buscaran entre el 2011 y el 2018. Pero solo lo busqué en el 2018 porque me dicen que el preso Monsalve en la cárcel se queja de que Cepeda le ha incumplido, de que él le mintió a Cepeda contra mi hermano y contra mí y que quiere decir la verdad. Es por eso que en 2018 yo mando a que se verifique esa información que me llega”.
Uribe fue acompañado en esta reunión con la CIDH por parlamentarios del Centro Democrático. El director del partido, Gabriel Vallejo Chujfi, solicitó a nombre de la colectividad al organismo garante de los derechos humanos en el continente un seguimiento a este caso judicial.