Consejeros de juventud: una apuesta en el aire   | El Nuevo Siglo
El Consejo de Juventud de Cali trabajó con la administración de Jorge Ospina y ahora lo hace con la del alcalde Alejandro Eder. / Foto Facebook Consejo de Juventud de Cali 
Viernes, 9 de Agosto de 2024
Redacción Política

El próximo año se realizará por segunda vez la elección de consejos municipales y locales de juventud en todo el país, los cuales se crearon para ser la voz de esta población ante las autoridades nacionales y regionales, buscando influir en las políticas públicas que les afecta.

Sin embargo, su impacto hasta el momento no ha sido el esperado, más que todo porque el alcance que les dio la ley se limita a la interlocución ante la institucionalidad para concertar y presentar propuestas.

Por ello, hace unos días parlamentarios de la Alianza Verde presentaron un proyecto de reforma que les daría un poco más incidencia.

El 5 de diciembre de 2021 se realizaron en todo el país los primeros comicios de consejos municipales y locales de juventud, en los cuales se eligieron 10.824 consejeros. No obstante, esa elección no cumplió el plazo de dos años para hacerla que había establecido la Ley 1885 de 2018.

Hasta entonces, por la falta de estos consejos no se había podido formular la política pública nacional de juventud, la cual debía confeccionarse en un plazo de 12 meses contados a partir de la elección de los consejeros de juventud municipales, según lo establece la ley estatutaria 1622 de 2013, por medio de la cual se expide el Estatuto de Ciudadanía Juvenil.

En los dos años que llevan los consejos municipales y locales de juventud se han detectado varias dificultades, como que muchos jóvenes han abandonado estos espacios de representación porque no reciben una remuneración económica, pues no lo establece la ley, pero desempeñar esta función sí les genera una inhabilidad para contratar con el Estado. 

También hay consejos que no tienen donde sesionar porque las alcaldías y gobernaciones no les suministran los sitios, o a veces las instalaciones y los elementos con que cuentan no son adecuados para que los jóvenes puedan desarrollar su labor.

El representante a la Cámara Alejandro García Ríos, coordinador en el Congreso de la Comisión Accidental de la Juventud, dijo a EL NUEVO SIGLO que “la elección de los consejos de juventud se demoró mucho en comenzar,  solamente Duque la aceleró  a raíz del estallido social; si no, no lo hubiesen convocado”.

Añadió el parlamentario de Alianza Verde que “como todo, la primera vez tuvo una participación pequeña, pero ha sido un trabajo que poco a poco pueda crecer la participación y tener mucha más fuerza”.

Agregó García que “muchos han afrontado problemas  de no tener un lugar donde reunirse, cuando las alcaldías deberían facilitar este lugar de reunión. Muchos han tenido problemas porque se inhabilitan para contratar con el sector público y algunos son líderes que trabajan y aportan en temas. Entonces tienen inhabilidades, pero no tienen remuneración y reconocimiento. Entonces también ha sido otro problema, porque ellos muchas veces de su plata están poniendo no solo los costos de los pasajes, sino de todo lo que implica la organización juvenil, y no tienen ningún incentivo”.

Enfatizó el parlamentario que hay más temas por trabajar, como el reto de seguridad, y “realmente tiene incidencia, porque en algunos municipios no han sido escuchados, no han sido tenidos en cuenta; en otros municipios y departamentos sí los invitan, los citan a las mesas, los tienen en cuenta y tienen incidencia real. Es un mecanismo nuevo que requiere de condiciones, garantías, incidencia, poder ejercer en tranquilidad su función o labor”.

Subrayó el representante García que “esto lleva dos años implementado, aún está en proceso de afinarse. Valoro y creo que es muy importante esta representación y que al contrario hay que darle unas herramientas para que funcionen”.

Se perdió tiempo 

El año pasado se hundió en último debate un proyecto de ley que buscaba reformar el Estatuto de Ciudadanía Juvenil, que fue liderado entre otros por la senadora Angélica Lozano Correa, del partido Alianza Verde, quien responsabilizó al Gobierno y a su bancada de que se archivara esta iniciativa.

“Prefirieron que se hundiera y dijeron que iban a radicar uno el 20 de julio (de 2023), y ya pasó un año y obviamente no hay nada”. Agregó que “lo hundieron básicamente porque no era del Pacto (Histórico). Racero (David) era el presidente de la Cámara, entonces no lo agendaba y lo agendó el último día”.

En la presente legislatura, Lozano y otros parlamentarios de Alianza Verde insistieron en radicar el proyecto para reformar el Estatuto de Ciudadanía Juvenil, que recoge al menos un 80 % del articulado de la iniciativa que se hundió el año pasado, y entre  sus propósitos aborda los consejos de juventud.  

Sin embargo, Lozano se lamentó porque “supongamos que se va aprobar ahora sí en un año, porque es estatutaria, aunque se apruebe no alcanza a regir en la nueva elección de consejeros de juventud. El daño que hicieron esa señora (la entonces consejera presidencial para la Juventud, Gabriela Posso) y el Pacto es que ni hacen ni dejan hacer”.

Agregó que “aunque se apruebe en un año, no alcanza a estar vigente, porque ya sería a mitad del 2025 y es estatutaria, por lo que debe tener revisión de la Corte antes de entrar en vigencia. Entonces, no alcanza a regir para la elección de los siguientes consejos de juventud, que deben elegirse como en diciembre del año entrante”.

Lozano en su balance de lo que han sido estos consejos en los dos años que llevan, dijo que es “agridulce,  muchos han desertado, depende de la voluntad política de cada municipio, de cada alcaldía si les quieren parar bolas o no. Si no quieren, no les ponen cuidado, entonces no influyen  y no los tienen en cuenta,  no los incorporan en nada.  Es eso muy susceptible a la voluntad de cada alcalde”.

 

Ajustes que hace nuevo proyecto

Sobre el proyecto recientemente radicado que reforma el Estatuto de Ciudadanía Juvenil, el representante García dijo que los cuatro aspectos más importantes son: “Tiene un componente de seguridad, de protección; resulta que no solamente los líderes sociales y ambientales son amenazados, también los líderes juveniles. El segundo corresponde a implementación o creación de políticas públicas de juventud en los territorios desde las gobernaciones y alcaldías, las cuales deben ser construidas con los jóvenes; es importante que los jóvenes sigan participando tanto de los consejos de juventud como de las plataformas y que ellos sean consultados en la construcción de las políticas que los van a afectar”.

Añadió que un tercer elemento es que se crea un observatorio nacional de juventud para hacerles seguimiento a los indicadores y otras apuestas de esta población. “Y en cuarto lugar, además del subsistema organizado de juventud que reconoce la participación de los jóvenes en los consejos municipales de juventud, que son más de 11 mil, y reconoce a los de las plataformas, que se incluyan jóvenes de distintos colectivos culturales, deportivos, ambientales, sociales, que no están en el subsistema de juventud, pero que son organizados, para que puedan también ser reconocidos como una voz representativa”.

 Otros ajustes que plantea el proyecto son:

. Desarrollo de asambleas para toda la juventud

. Presupuestos específicos para juventud

. Se destinarán recursos exclusivos para impulsar programas y proyectos juveniles

. Incentivos y reconocimientos para motivar y premiar la participación juvenil

. Reducción de plazos de formulación de políticas públicas de juventud

. Se adicionarán funciones a los consejos y plataformas juveniles, ampliando sus competencias y capacidades para una participación más robusta

. El Sistema Nacional de Juventud será modificado, asignando responsabilidad al Sistema de Gestión del Conocimiento

. Las comisiones de concertación y decisión serán fortalecidas para que las voces juveniles tengan un impacto significativo en las políticas públicas.