UNA RESOLUCIÓN expedida por el Ministerio de Agricultura, en la cual se delimita una zona de reserva agrícola para protección alimentaria en el suroeste de Antioquia, generó una fuerte controversia entre la titular de esa cartera Martha Carvajalino, y el representante a la Cámara del Centro Democrático Hernán Cadavid.
Según explicó el parlamentario, “señora ministra de Agricultura, usted firmó la resolución del Suroeste antioqueño sin conocer la región. Sin tener en cuenta que un informe de las principales centrales de abasto de Antioquia las subregiones que más contribuyen con alimento son 1. Oriente 13%; 2. Occidente 11%; 3. Suroeste 11%; y 4. Norte 10%. ¿Se da cuenta? Cuando la invitamos al departamento de Antioquia en el recinto de la Asamblea Departamental para que, ante los gremios, la asamblea, congresistas, sectores productivos, y representaciones de los municipios diera las explicaciones que correspondía, nunca lo hizo”.
Cadavid, continúo y agregó que “luego de expedir el decreto, la ministra de Agricultura aparece a pedir acuerdos cuando ya expidió la dañina resolución del suroeste. ¿Por qué ni usted ni su equipo llegaron a las conversaciones que se propiciaron en Antioquia antes de causar el daño? Ahora sí, a dar explicaciones de una resolución que expidieron de manera casi clandestina terminando el año. Escuchando a la ministra dudo que alguna vez haya estado en la región del suroeste. Todo se trata de una persecución a sectores productivos. ¿Por qué no focalizó La Mojana, la Altillanura? Zonas aptas para alimentos. Todas en alerta con este entuerto del gobierno en Antioquia”.
Luego de las interpelaciones del parlamentario, la ministra Martha Carvajalino manifestó que “en relación sobre algunas voces que imponen sobre la zona de especial protección para producción de alimentos fantasmas y miedos, algunas precisiones. El Ministerio de Agricultura ha definido una zona de estudio para determinar las áreas que hoy garantizan el abastecimiento alimentario y allí, con posterioridad, declarar las Áreas de Especial Protección para la Producción de Alimentos. Nuestra definición no limita actividades ni determina usos, y sí nos permite acercarnos a donde hoy se desarrolla la actividad agropecuaria para protegerla”.
Del mismo modo, Carvajalino indicó que “con la declaratoria de estas áreas, una vez adelantamos el proceso iniciado, salvaguardaremos, de los cambios de uso irregular del suelo rural, las activadas agrarias que ponen alimentos en las ciudades. Protegeremos las actividades pecuarias, agrícolas y pesqueras, de esas actividades que hoy jalonan la economía sin restringir uso de suelos”.