Si bien las conversaciones para poner punto final al conflicto armado con las Farc se desarrollan en La Habana (Cuba), la paz se tendrá que construir en las diferentes regiones de Colombia, señaló Alan Jara, gobernador del Meta.

En ese sentido frente al proceso de restitución de tierras y teniendo en cuenta que este departamento ha sido uno de los más afectados por el despojo, el Mandatario regional dijo que no es ideal la velocidad con que se adelanta. También aseguró que hay zonas en donde ya existen las condiciones de seguridad para iniciar este trabajo.

EL NUEVO SIGLO: ¿Qué opinión tiene del proyecto gubernamental que  crea las zonas de interés de desarrollo rural  y económico en regiones olvidadas, que algunos consideran revive la iniciativa de altillanura?

ALAN JARA: Indudablemente para el caso del Meta, el Vichada, estos departamentos que conforman la altillanura, es muy importante que se definan las reglas porque hay una incertidumbre en lo jurídico, hay una incertidumbre en relación a los predios que hoy tienen ya unos propietarios o unos poseedores durante mucho tiempo, y para poder pensar en el desarrollo de la altillanura es fundamental que estén las reglas claras, que se conozca qué es lo que se va a hacer y bajo qué normas.

Como está hoy se produjo un freno en unas inversiones, se generó una incertidumbre en unas personas que durante años han tenido unos predios, generaciones inclusive algunos, y tienen desde luego su gran preocupación. Lo que pediría como Gobernador es que se pongan las reglas claras, más allá del debate que se está generando en términos de qué áreas o de qué posibilidad de asociatividad o hasta qué tope podrían adelantarse las asociaciones que allí generen, lo más importante es que haya unas reglas claras, de eso es lo que se trata.    

ENS: ¿Cómo avanza en el Meta la restitución de tierras, uno de los departamentos más afectados por el despojo?

AJ: El Meta desde luego es uno de los departamentos donde hay un gran número de reclamaciones, en donde también hay un gran número de hectáreas pedidas y la velocidad a la que se adelanta no es la ideal.

Adicional a ello, hay dificultades también en titulación porque esto ha desbordado la capacidad operativa del Incoder, a tal punto que nos han pedido que como Gobernación, nosotros coadyuvemos con  recursos  para poder adelantar escrituraciones, eso desde luego es una función misional del Incoder, y nosotros nos hemos visto obligados a conseguir recursos para poderlos asignar al Incoder para que éste cumpla con su función.

Ese no es el ideal, esas no son funciones del departamento, nos hemos visto obligados a hacerlas para con este apoyo acelerar los procesos de titulación, pero definitivamente eso no marcha a buen ritmo y se requieren recursos para ello.

ENS: ¿Desde su mirada de víctima directa del conflicto armado, cómo ve el desarrollo de las conversaciones de paz en La Habana?

AJ: Soy optimista frente a la posibilidad de paz,  creo que esa es una obligación que tenemos todos los colombianos de trabajar por la paz, de apoyar la posibilidad de paz, y en esa perspectiva es que asistí como víctima invitado por Naciones Unidas, invitado por el Centro de Pensamiento de la Universidad Nacional y la Conferencia Episcopal, y en los 15 minutos que estuve allá (La Habana) para intervenir, pues desde luego expuse cuál había sido la circunstancia de mi secuestro y también  expuse desde el punto de vista de las víctimas, qué espera uno en  un proceso y es que haya verdad, que haya justicia, que haya reparación, pero sobre todo que haya garantía de no repetición. Y expuse también desde el punto de vista territorial, regional, de lo que vemos en los territorios. Porque como siempre hemos dicho, pues en La Habana se está discutiendo la posibilidad de ponerle fin al conflicto, pero es en los territorios en donde tendrá que construirse la paz. En esos tres aspectos basé mi intervención y repito las palabras con que terminé en La Habana: la garantía de no repetición es la terminación del conflicto y la mejor reparación colectiva es la paz.

Restitución

El gobernador Jara dijo sobre las zonas en que no ha arrancado la restitución de tierras que “en el Meta no estamos en posconflicto, estamos en conflicto. Hay zonas del Meta que tienen dificultades de orden público, y en esas zonas pensar en que haya un regreso de las personas que fueron despojadas de sus predios, pues desde luego mientras no esté resuelto el tema de orden público no sería procedente; pero igualmente hay zonas consolidadas a las cuales ya podría pensarse en esa posibilidad, y cada caso es individual, pero no puede generalizarse”.